jueves, abril 25

EVANGELIO DEL DÍA

0
181

EVANGELIO DEL DÍA 💫

Lucas 1,26-38:

A los seis meses, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la estirpe de David; la virgen se llamaba María.
El ángel, entrando en su presencia, dijo: «Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.»
Ella se turbó ante estas palabras y se preguntaba qué saludo era aquél.
El ángel le dijo: «No temas, María, porque has encontrado gracia ante Dios. Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. Será grande, se llamará Hijo del Altísimo, el Señor Dios le dará el trono de David, su padre, reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin.»
Y María dijo al ángel: «¿Cómo será eso, pues no conozco a varón?»
El ángel le contestó: «El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el Santo que va a nacer se llamará Hijo de Dios. Ahí tienes a tu pariente Isabel, que, a pesar de su vejez, ha concebido un hijo, y ya está de seis meses la que llamaban estéril, porque para Dios nada hay imposible.»
María contestó: «Aquí está la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra.»
Y la dejó el ángel.

Palabra del Señor
💫MEDITACIÓN DEL EVANGELIO 💫

Lucas 1, 26-38:

💫El anuncio del ángel.

1) El ángel entró:

Es poder entender que en la vida lo sobrenatural llega también a tu vida. Jesús pone a esas personas que entran en tu vida para anunciarte que tenés que hacer aquí en la tierra algo, ese algo que es un bien para los demás. No dejes de abrirte a lo nuevo. No te cierres a lo que la vida te quiere proponer, ¡soltate! Y, sobre todo, déjate sorprender por Dios y por esos ángeles que te pone para marcarte el camino.

2) El Espíritu Santo:

La fuerza del Espíritu que obra actúa en vos. Muchas veces nos desanimamos, pero tenemos que dimensionar la fuerza del Espíritu Santo. Es el mismo Espíritu quien obra en vos y en mí, en la Iglesia. Deja que el Espíritu saque de vos todos esos miedos y te ayude a que puedas cumplir con la obra que Dios te manda. Dios te pide una misión, pero también te da su fuerza para que la puedas cumplir.

3) Esclava:

Es María la esclava por amor, porque se entrega a ese nuevo rumbo de su vida, pero confiando. Es esto lo que nos propone, tirarnos a la pileta. Es saber que Dios está detrás mío sosteniéndome. Por eso anímate a seguir, no dejes de confiar en Dios. Aunque creas que todo está perdido, vos tenés la fuerza de Dios. Abandónate. ¡Todo estará bien! Hasta el cielo no paramos.