Este jueves el pánico azotó la sede del hotel Hyatt en la Riviera Maya, cuando dos bandas rivales de narcotraficantes irrumpieron a los tiros en el lujoso edificio del caribe mexicano. Dos de sus integrantes perdieron la vida en el episodio, según informaron las autoridades.

El tiroteo desconcertó a los turistas y trabajadores que transitaban las instalaciones, y la incertidumbre duró al menos una hora. En esa instancia, el caos y la confusión parecían irreversibles. Horas después, la Fiscalía confirmó que dos de los criminales habían perdido la vida, mientras que no se habían registrado turistas heridos.

Según los informes policiales, se descubrió que diez hombres que portaban armas largas ingresaron por la zona balnearia que da paso a los hoteles Hyatt Ziva Riviera y Azul Beach.

La primicia trascendió cuando Mike Sington, un ejecutivo de la cadena de televisión estadounidense NBC, que se estaba hospedando en el hotel, publicó casi telegráficamente: “Tirador activo en la propiedad del Hyatt Ziva Riviera. Todos los huéspedes y empleados se están escondiendo. Paramédicos han llegado”.

Entre las publicaciones que comenzaron a viralizarse en las redes sociales se puede ver cómo los turistas que deambulaban por el espacio común son escoltados al lobby del edificio, mientras que los que estaban cerca de las habitaciones empiezan a formar barricadas por no saber qué pasaba. “Se están tomando medidas en un esfuerzo por garantizar la seguridad de los huéspedes y colegas”, declararon desde el hotel a la cadena Telemundo.

Aún se desconoce cómo el resto de las bandas contendientes escaparon de la bahía.

Según advierte El País, edición México, “Quintana Roo ha rebasado el umbral de los 1.000 homicidios durante los primeros nueve meses del año”. El dato es tomado de las fuentes oficiales, y de acuerdo a la última Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (Envipe), una estadística que refleja con fidelidad la opinión pública, ocho de cada diez habitantes se sienten inseguros en el Estado.

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