Elisa Carrió aseguró que aun cuando el presidente Alberto Fernández “no muestra competencia” para ser el máximo mandatario de la Argentina, “hay que sostenerlo”. Agregó, además, no guardar “rencor” hacia su figura y sentirse verdaderamente preocupada por “su salud”.
La líder de la Coalición Cívica definió al actual mandatario como un “lobbista” y prosiguió a recalcar que estar a favor o en contra no quita que no haya sido el “elegido” por el pueblo argentino.
Acto seguido, criticó la falta de “autoridad” de la administración Fernández y pasó a centrarse en la vicepresidenta Cristina Kirchner.
En diálogo con José del Río a través del medio LN+, y en relación los procesos judiciales en los que se encuentra inmersa la también presidenta del Senado, enfatizó que, “cuando le llegue la condena”, estará detenida en su domicilio con “70 años”. Remarcó, además, que la “búsqueda de venganza” Kirchner y su “resentimiento” hacia la justicia “da mucha pena”.
En otro tramo de la entrevista, la protagonista trató de “imbécil” al exministro de Justicia durante el gobierno de Cambiemos, Germán Garavano, al sostener que “es una persona falta de inteligencia”, y además lo acusó de entorpecer algunas importantes investigaciones judiciales, como la del atentado a la AMIA y su posterior encubrimiento.