jueves, abril 25

Cena íntima y resaca: las confesiones de Djokovic y Sharapova en un vivo de Instagram

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El serbio y la rusa compartieron una transmisión en la que recordaron las circunstancias en que se conocieron. «Te comportaste como un fan», tiró la ex tenista

La cuarentena obligatoria por la pandemia del coronavirus en todo el mundo permite que los deportistas de elite se vuelvan “terrenales” e interactúen con sus seguidores a través de las redes sociales.

Uno de los ejemplos es la divertida charla que mantuvieron el día martes en un transmisión directa de Instagram, Novak Djokovic y Maria Sharapova.

Dos de los grandes iconos del tenis mundial aprovecharon para recordar inéditos episodios, como el evento en el que se conocieron y la primera cita que tuvieron ambos gracias a una apuesta que le ganó el serbio a la rusa tras vencerla ese mismo día.

“Jugamos un dobles mixto en contra y me dijiste que si tú ganabas, yo tenía que pagarte una cena. Yo contesté que sí, pero pensando que quién era ese niño. Lo que pasó es que ganaste y me repetiste: ‘Tenemos que ir a cenar esta noche a un restaurante japonés”, contó Sharapova.

La rusa continuó desarrollando la cita y dijo que Djokovic sacó de su bolsillo una vieja cámara Kodak para inmortalizar el momento con una fotografía. “Es que sacaste la cámara y le pediste al camarero que nos tirara una foto. Te comportaste como un fan”, recordaba la rusa.

Entre las anécdotas que compartieron, el serbio sorprendió con una en que reveló que jugó un partido bajo las secuelas del alcohol tras haber ganado el torneo de Wimbledon. 

“Fue en 2011. Venía de ganar Wimbledon, de cumplir todos mis sueños. Viajé para la Copa Davis y estuve con el equipo, pero pedí no jugar ningún partido oficial aquel fin de semana en el que Serbia jugaba contra Suecia. Al final me sacaron a jugar el dobles el sábado. En ese partido, vamos a decir que no vi la bola claramente. Vamos a dejarlo ahí”, reconoció Nole.

Por último, Sharapova explicó el por qué de su retiro: “Estos dos últimos años mi fuerza de voluntad encontraba un freno en mi estado físico, en mi cuerpo. Sufrí mucho físicamente, pensaba que eran baches que podía superar, buscaba cualquier modo de hacerlo, pero seguía sufriendo en la cancha. Había cosas que eran parte de mí, pero ya no sentía lo mismo cuando por ejemplo iba al sótano y me ponía con la bici estática, pensaba que qué estaba haciendo”.