Cinco limpiadores naturales para usar en el hogar

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Algunas mezclas caseras para limpiar y dejar un lindo aroma

A pesar de que hoy en día existen una gran variedad de productos industriales para limpiar cada objeto y superficie de forma eficaz, algunos deciden probar algunas alternativas, como los desinfectantes naturales.

Son aquellos alimentos que, por su composición, tienen cierto potencial limpiador y quitagrasas. Si bien no son un sustituto 100 % eficaz de los productos de limpieza, pueden resultar útiles en ocasiones.

1. Vinagre de manzana

Mezclarlo con agua oxigenada dará como resultado un eficaz desinfectante. Es un producto ideal para limpiar superficies grasientas como la encimera de la cocina o la campana.

En una botella de medio litro con atomizador, vertí:

– 1 vaso de vinagre de manzana (250 ml)

– 5 cucharadas de agua oxigenada (50 ml)

Antes de usar, agitar un poco el recipiente para sacarle el máximo provecho a la mezcla.

2. Vinagre blanco y jugo de limón

Esta mezcla es un desinfectante muy efectivo. Mezclá en un recipiente:

– 1 litro de agua

– El jugo de 1 limón

– 1 vaso de vinagre (250 ml)

Sirve especialmente bien para limpiar el inodoro. Vertí por la noche un vaso de vinagre blanco diluido en un litro de agua. Añadí unas gotas de aceite esencial de limón, y verás al día siguiente que estará más limpio y con agradable aroma.

3. Agua oxigenada y aceite del árbol de té

Resulta útil para limpiar los muebles del baño y los espacios de la ducha que tienden a acumular moho. Mezclá en un recipiente con atomizador:

– 500 ml de agua

– 150 ml de agua oxigenada

– 50 ml de jugo de limón

– 10 gotas de aceite del árbol del té

Agitá la botella antes de usarlo para aprovechar al máximo su poder limpiador.

4. Aceite del árbol de té y lavanda

Se puede usar para muebles como cajones y armarios, y también para espacios cerrados concretos. Incluso, podés usarla para desodorizar los zapatos y los muebles zapateros. Necesitás diluir en un vaso de agua unas cuantas gotas de la mezcla de aceites y colocalo en un recipiente con atomizador para rociar los zapatos por dentro y las baldas del mueble. Si lo usás en calzados, dejalos secando al sol después, para evitar el exceso de humedad.

5. Agua de romero

Usala para lavar toallas, alfombras pequeñas como la del baño, y toallas de cocina. Necesitás:

– Romero fresco (200 g)

– 1 litro de agua hirviendo

Colocá el romero en el agua hirviendo y dejalo durante unos minutos. Luego, apagá el fuego y dejalo entibiar.

Finalmente, vertilo en un recipiente y usalo para poner en remojo los trapos o paños de la cocina. Una vez remojados, podés lavarlos en la lavadora o a mano, con jabón de lavar o un poco de lavaplatos. También podés usar la mezcla para limpiar los azulejos y los muebles del baño, el inodoro y el suelo.

Fuente: Mejor con salud