viernes, marzo 29

Copa América frustrada: Lammens pierde peso interno y sonríe Kicillof

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El ministro volvió a perder una pulseada fundamental, sufriendo un doble golpe: no contará con la carta de la Copa América en su gestión, y se cayeron las miles de reservas hoteleras que estaban garantizadas para las delegaciones; el factor Kicillof y el «efecto pinzas» con La Cámpora “No es sólo La Cámpora; también es la gente de Kicillof”, reconoció a NEXOFIN una fuente de Casa Rosada, para explicar la interna que busca esmerilar la imagen del ministro de Deportes y Turismo, Matías Lammens.

En las últimas semanas, integrantes del Gobierno Nacional reconocieron ante diferentes consultas periodísticas que los cruces con el kirchnerismo existen. Fue el propio ministro del Interior, Wado de Pedro, quien este fin de semana reconoció ante las cámaras de C5N estas diferencias, para luego agregar: “Es una coalición y tener voces encontradas nos fortalece”.

Sin embargo, cerca de Lammens hay disgusto por una sucesión de errores no forzados propios y decisiones gubernamentales del Ejecutivo que en las últimas semanas hicieron que el coro interno de voces críticas sumara nuevos registros.

“Persigue intereses propios; no tuvo ni intenciones de participar en los debates por las clases presenciales en la Ciudad para no confrontar con Larreta”, reconoció a NEXOFIN un referente de la Provincia de Buenos Aires. “El otro día hasta desde Casa Rosada le tiraron de la oreja por este tema”, agregó, en referencia a un off publicado por Infobae donde quedaba a las claras el descontento con el ministro de Turismo y Deportes.

A este panorama se le sumó la decisión del presidente, Alberto Fernández, de suspender la Copa América en Argentina, siendo una de las pocas cartas de éxito que le quedaban al ministro. Esta decisión significó un doble golpe para el funcionario: no sólo porque no podrá organizar el certamen continental, sino porque se cae una de las pocas inyecciones de dinero que iban a recibir los hoteles, que ven a los turistas extranjeros como un capítulo idílico de su pasado.

Fue un ladero del gobernador bonaerense, Axel Kicillof, quien tiró de la cuerda para poner en duda la realización del certamen, aún cuando el propio ministro aseguraba públicamente que la Copa América se jugaría en territorio albiceleste. El viceministro de salud provincial, Nicolás Kreplak, planteó sus dudas y hasta deslizó que lo mejor sería postergar el torneo. “Si se pospusiera un par de meses, sería mucho más simple. Hay un automatismo en alguna toma de decisiones, como si estuviéramos viviendo un contexto normal. Es un momento muy complejo. Se podría posponer. Nosotros amamos el fútbol. No es que no queremos la Copa o que no se haga en el pais, pero no es el mejor momento”.

Pocos días después, la voz del viceministro bonaerense se imponía a la del ministro de Deportes y Turismo de la Nación.

En las últimas semanas, Lammens hizo pública su decisión de competir en 2021, con miras a su soñada jefatura de gobierno porteño en 2023. Sin embargo, dentro de La Cámpora tienen otros planes y de eso se encargó el flamante presidente del PJ porteño, Mariano Recalde. Consultado en una reciente entrevista por la posibilidad de que el ex presidente de San Lorenzo sea la carta del Frente de Todos para competir en la Ciudad en 2023, respondió: “Los nombres que van a representar ese proyecto se decidirán en su momento. Lo que necesitamos es un proyecto de ciudad claro, que sepa por qué estamos en desacuerdo con lo que hicieron Macri y Larreta en la Ciudad”.

Un claro mensaje por lo bajo a las ya mencionadas críticas contra el ministro por su decisión de no confrontar con Larreta.