El norte provincial vive una situación crítica. Las precipitaciones no dan tregua y advierten que el río podría continuar en crecida.
En las últimas semanas, la crecida del Río Bermejo ha generado una difícil situación para decenas de familias en los parajes de San Felipe y La Esperanza, ubicados aproximadamente a 25 kilómetros de Rivadavia Banda Sur, en el norte salteño. La emergencia se intensifica debido al colapso total de los caminos comunitarios a causa del desborde del mencionado río.
La incomunicación afecta no solo a San Felipe y La Esperanza, sino también a otras localidades intermedias, las cuales se encuentran aisladas desde hace tres semanas debido al desbordamiento de las cañadas que reciben el agua proveniente de la crecida del Bermejo. Las precipitaciones registradas aguas arriba de la cuenca contribuyen a mantener la zona en una situación crítica, expresó El Tribuno.
En un contacto con Radio Salta, Dalmiro Acosta, docente bilingüe en el paraje San Felipe, compartió información crucial sobre la situación. Acosta pudo llegar a pie hasta Rivadavia, donde finalmente consiguió señal para comunicarse y solicitar ayuda. La falta de acceso a estas comunidades agrava la necesidad de asistencia, y las autoridades locales están trabajando arduamente para abordar esta emergencia y proporcionar el apoyo necesario a las familias afectadas.
Seguiremos informando sobre el desarrollo de la situación y las medidas tomadas para hacer frente a las complicaciones derivadas de la crecida del Río Bermejo en el norte salteño.
Desesperante situación de aborígenes y criollos en San Felipe y La Esperanza por la crecida del río Bermejo.
Una difícil situación atraviesan decenas de familias de los parajes de San Felipe y La Esperanza, a 25 kilómetros aproximadamente de Rivadavia Banda Sur, donde los caminos comunitarios se encuentran totalmente colapsados por el desborde del Río Bermejo.
Los mencionados parajes y otras localidades intermedias se encuentran incomunicados desde hace tres semanas por el desborde de las cañadas que reciben el agua de la creciente del Bermejo y que se mantienen en esa zona como consecuencia de las precipitaciones que se registran aguas arriba de la cuenca.
En contacto con Radio Salta, Dalmiro Acosta docente bilingüe en el paraje San Felipe, informó sobre la situación ya que pudo llegar a caminando a Rivadavia donde recién pudo conseguir señala para pedir ayuda.
Caminó en el agua para pedir ayuda
Luego de caminar 25 kilómetros con el agua a la cintura, Acosta relató que las familias de ese paraje están viviendo una situación critica ya que no pueden llegar al pueblo para conseguir alimentos y deben beber agua del río desbordado que rodea a las viviendas.
«Tenemos un camino vecinal que es el único que une la comunidad con Rivadavia pero desde hace 3 semanas que está inundado y no podemos llegar al pueblo para buscar provisiones. El río está a tres kilómetros de San Felipe pero el agua nos dejó aislados totalmente» expresó.
Una vista de la inundación en el camino vecinal.
El docente explicó también que en San Felipe viven 45 familias todas originarias aunque advirtió que la situación es mucho más crítica en La Esperanza, donde residen 60 familias entre criollos y aborígenes. «Allí el agua los ha rodeado y los terraplenes no pueden contener el desborde. Allí están mas cerca del río y son muchos más» aseguró.
«Necesitamos con urgencia agua y alimentos y algún remedio para la fiebre. Cuando pasan estas cosas salen muchas víboras y es muy peligroso» explicó.