jueves, marzo 28

Declaró el testaferro de Muñoz, ex secretario de los Kirchner, y señaló a los verdaderos dueños de su fortuna

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El mexicano Isaac Eugenio Esparza Hidalgo, mano derecha del fallecido secretario del exPresidente, es dueño de una fortuna de 70 millones de dólares. En su alegato, sacó a la luz una trama de relaciones políticas del kirchnerismo santacruceño alrededor del blanqueo del dinero.

Daniel Muñoz, exsecretario de Néstor Kirchner y Cristina Ferández, realizó en los últimos años de su vida una serie de inversiones inmobiliarias, que comenzaron con lugares “humildes” en la Patagonia y concluyeron con grandes terrenos en las Islas Turcas y Caicos y departamentos lujosos en los Estados Unidos.

20 años antes de tener una enorme fortuna en dinero y propiedades, Daniel Muñoz manejaba un taxi y su realidad era muy diferente a la de después de conocer a los Kirchner.

Luego de su muerte, su aliado, el mexicano Isaac Eugenio Esparza Hidalgo sacó a la luz una trama de relaciones políticas que dejan en evidencia a los verdaderos dueños de esa fortuna.

Según el juez Julián Ercolini, Daniel Muñoz fue “un engranaje clave en el circuito de acumulación y traslado del dinero de los titulares del Poder Ejecutivo, en particular en lo referido a la recaudación de los fondos ilegales (se logró individualizar más de sesenta entregas de dinero que fueron recibidas personalmente por Muñoz), su derivación a los jefes y organizadores (incluyendo el traslado semanal del dinero en valijas y por medio de aviones oficiales de la Agrupación Aérea Presidencial desde el sector militar del Aeroparque Metropolitano “Jorge Newbery” de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires hasta los aeropuertos de Río Gallegos y El Calafate, en la Provincia de Santa Cruz) o la aplicación de esos fondos a otras actividades delictivas”.

La causa es un desprendimiento del caso de los cuadernos de las coimas, ya que el chofer del ministerio de Planificación Federal Oscar Centeno describió que los pagos ilegales de las empresas en ocasiones eran llevados al departamento de los Kirchner en Uruguay y Juncal, donde los recibía Muñoz.

Buena parte de los 70 millones de dólares de Muñoz se perdió y no se sabe nada del dinero. Los acusados dicen que se los quedaron los abogados. Solo una parte menor, la que se invirtió en las parcelas de Turks & Caicos, una isla del mar caribe, pudo ser congelada a pedido de la Justicia argentina en 2019. Pero se adoptó esa medida solo para una de las cuatro parcelas adquiridas.

Esparza Hidalgo, quien prestó su firma para comprar 40 hectáreas en Turcas y Caicos con unos 30 millones de dólares, producto de ese dinero negro, es el único preso en este caso. Está detenido desde hace un año, primero en Monterrey y desde hace casi un mes -cuando fue extraditado por México- en la cárcel federal de Marcos Paz, en la provincia de Buenos Aires.

A pesar de haber sido titular de dos sociedades que compraron los terrenos para montar un complejo hotelero de 500 millones de dólares con 100 habitaciones y 50 villas junto al mar, donde se iba a cobrar casi 1.000 dólares la noche, hoy el mexicano no tiene plata para pagar su fianza de 2.500.000 pesos.

Además, el juez Julián Ercolini está al mando de una investigación contra Muñoz, en la que surgieron nuevas propiedades que se le habían escapado a la Justicia. Muchas de las compras del exsecretario de los Kirchner se hicieron bajo la tutela de las sociedades de Víctor Manzanares, otro aliado de los Kirchner.

Hay 113 propiedades incluidas en la investigación de Ercolini contra Muñoz. Sus adquisiciones comenzaron en Santa Cruz y siguieron por el resto del mundo. Uno de los terrenos más grandes es “La Lucía”, una estancia de 20.000 hectáreas en Santa Cruz. Se estima que el exsecretario K desembolsó alrededor de 500.000 dólares en la maniobra. Unos años después, fue vendida por medio del manejo de Manzanares por cuatro veces más caro que su precio de compra.