“Parece una escena armada: ¿cómo una monja va a filmar a un obispo en un velorio?”, reflexiona ante los medios el sacerdote Oscar Ossola, en relación a las denuncias que pesan sobre el arzobispo de Salta, Monseñor Mario Cargnello. 

El escándalo que se conoció en las vísperas de Semana Santa continúa sumando capítulos, actores e intervenciones incluso de la Santa Sede del Vaticano. 

En este sentido, el párroco de la iglesia de San Lorenzo, reconoció que se trata de un tema tan delicado como grave y que atento a ello, monseñor se presentó a la Justicia al igual que los otros sacerdotes involucrados en la causa. 

“Este lunes Monseñor volvió a declarar, se hicieron pericias y será la Señora Jueza la que tendrá que dictaminar y si hubo algún tipo de violencia, y de ser así que la paguen”, comentó Ossola y reconoció que el arzobispo levantó la voz hacia las hermanas en un velorio al percatarse de que estaba siendo filmado. 

“Si Monseñor levantó la voz, les faltó el respeto, la Justicia debe dictaminarlo para no permitirlo ni convivir con ningún tipo de violencia, sea quien fuere, eso está fuera de discusión”

El tratamiento mediático y las vinculaciones entre la abogada de las Carmelitas Descalzas con la Virgen del Cerro y María Livia también son señalados por el padre Ossola quien insiste en que “hay segundas intenciones evidentes que son imposible negar”. 

Un velorio como detonante

Así como relata el párroco del a Iglesia de San Lorenzo, la situación donde monseñor habría levantado el tono de voz ante las hermanas fue en un velorio de una de ellas, primero por la imagen que coronaba el cortejo fúnebre y luego al notar que estaba siendo filmado.

“¿A quién no le llamaría la atención que en la cabecera del féretro pongan una imagen de la Virgen del Cerro sabiendo que el obispo siempre les pidió que respondan a la Virgen del Carmen?”, interroga Ossola y añade: “Parece una escena tan armada… ‘Le pongamos la virgen, lo hagamos enojar, que reniegue, y haya una monja filmando’. ¿Cómo una monja va a estar filmando a un obispo en un velorio?”, relata el sacerdote. 

Propiedades y alquileres

Dentro de los ribetes que se fueron conociendo a partir de la mediatización del caso, se encuentra el patrimonio con el que cuenta la Orden de las Carmelitas Descalzas en la ciudad. Así como explica Ossola, el convento mismo pertenece al Monasterio, no es propiedad de la arquidiócesis de Salta. “Del mismo modo hay donaciones de hace muchos años. Son propiedades que se traducen en ingresos que deberían ayudar a la vida monástica de las hermanas”, comentó el sacerdote.

Obediencia y pertenencia

Más allá de los hechos que investiga la justicia, distintos funcionarios religiosos que tomaron la palabra en defensa de Monseñor resaltan que uno de los “detonantes” fue la intromisión de los cultos a la Virgen del Cerro por parte de las hermanas descalzas. 

“El conflicto escala cuando la madre superiora le reitera a monseñor que ellas se identifican con la Virgen del Cerro y que ahora quieren ser parte de esta advocación y dejar de ser Carmelitas”, reconoce Ossola.

Luego de instancias donde el Vaticano envió ministros de la iglesia en octubre del 2021: “en esos informes ya se hacen notar irregularidades, entre esos está tema de que quieren ser servidoras de la Virgen del Cerro”, añade el presbítero en su paso por Agenda Abierta. 

“Quién pudiera dudar que las hermanas actúan por incitación de ellos”, cierra Ossola, deslizando que hay intereses ocultos detrás de toda la causa.