miércoles, abril 24

El arresto domiciliario de Amado Boudou, en una lujosa casa con ascensor, piscina y quincho

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El ex vice tiene condena firme por corrupción en el caso Ciccone, y debería volver a la cárcel. Pero apeló, y mientras vive en una opulenta mansión en el barrio Quinta Galli de Avellaneda. Dos docenas de fiscales y jueces de cuatro instancias investigaron, juzgaron y lo condenaron por corrupción en el caso Ciccone, y le impusieron una pena de cinco años y diez meses de prisión. Sin embargo, Amado Boudou continúa con el beneficio de la prisión domiciliaria, y lo hace en una suntuosa casa, con todas la comodidades, ubicada en el barrio más coqueto de Avellaneda.

La mansión ubicada en el corazón de Quinta Galli cuenta con cuatro pisos conectados por un ascensor, un parques vestido con añosas palmeras que rodean una gran pileta a metros del quincho para disfrutar de la parrilla. Además, la propiedad tiene cinco dormitorios distribuidos en cuatro pisos, varios ambiente organizados como livings y play room, y baños en todas las plantas.

El barrio en el que ahora reside el ex vicepresidente está ubicado a pocas cuadras del centro de Avellenada y lo conforman varias manzanas de casas bajas construidas en lotes grandes, divididos del predio en el que hace más de un siglo estaba la “quinta” de la familia Galli.

La silenciosa llegada de la familia Boudou -Amado, su esposa mexicana y sus dos pequeños mellizos- al barrio, el 23 de septiembre del año pasado, cuando dejó su vivienda en el barrio porteño de Barracas, fue recibida más bien de forma sospechosa por sus vecinos. “Cuando nos enteramos que se había instalado en una de las casas más lujosas del barrio, que estuvo desocupada mucho tiempo, algunos vecinos quisieron organizar un escrache”, contó al diario Clarín una mujer que vive en esa misma cuadra.

“Yo no lo compartí, no me parece, pero todos estamos muy descontentos de que esté acá. Además, hay mucha bronca porque todos creemos que el alquiler y los gastos los paga la municipalidad de Avellaneda”, agregó. Antes de la llegada de Boudou, la casa estuvo en venta mucho tiempo por la inmobiliaria Alavarez, donde se ofrecen la mayoría de las casa de Quinta Galli.

Clarín no pudo confirmar la sospecha de los vecinos de Quinta Galli respecto al rol de la municipalidad de Avellaneda -conducida hasta hace dos meses por el ultracristinista intendente Jorge Ferraresi, ahora ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat-, pero tampoco desmentirla.

Sin embargo, los fiscales que supervisan la detención domiciliaria del ex vice fueron informados de que “el grupo familiar cuenta con ingresos económicos provenientes del alquiler de un departamento de Boudou, del alquiler de un departamento de la señora García de la Fuente en México, del sueldo de la nombrada como asesora en la Cámara de Senadores, de la pensión que recibe Boudou como ex vicepresidente de la Nación, ahorros, apoyo económico de familiares y compañeros de la política”.

“Acá no hay custodia, ni nada. Algunas veces lo vimos salir a Boudou en bicicleta, medio desarreglado, de entrecasa. Tiene una empleada doméstica que saca la basura todas las tardes. Pero nadie jamás diría que está preso”, coinciden todos sus vecinos.

Boudou está en arresto domiciliario desde abril pasado cuando el juez Daniel Obligado así lo dispuso y lo mandó a controlar con una tobillera electrónica. Luego la Corte Suprema de Justicia dejó firme su condena el 3 de diciembre pasado y desde entonces los fiscales Marcelo Colombo y Guillermina García Padin pidieron que regrese a prisión a cumplir su condena.

No obstante, la decisión del juez no se materializó de manera inmediata porque Boudou puede recurrir esta medida mediante un recurso de Casación y la detención en prisión solo podría ejecutarse cuando el fallo quede firme, lo que se analizaría luego de la feria judicial de verano.

Fuente: Clarín.