El secretario de Transporte, Franco Mogetta, confirmó la exclusión del sindicalista, en medio del caos generado por un paro que dejó a más de 37.000 personas varadas y provocó la cancelación de cientos de vuelos.

El Gobierno nacional, a través del secretario de Transporte, Franco Mogetta, anunció la exclusión del sindicalista Pablo Biró, titular de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), del directorio de Aerolíneas Argentinas. La medida se da en medio del caos provocado por un paro inesperado que afectó a más de 37.000 pasajeros y resultó en la cancelación de 319 vuelos.

El paro, encabezado por los gremios de pilotos y tripulantes de cabina, ha generado fuertes críticas desde el Gobierno, que calificó la protesta como “abusiva y descontextualizada”. Según Mogetta, “la medida no solo afecta a miles de pasajeros, sino que además genera pérdidas millonarias para la compañía de bandera”. Ante este escenario, el funcionario fue categórico al señalar que “Pablo Biró será excluido del directorio de la empresa la semana próxima, en la próxima asamblea”.

Biró, un sindicalista con fuertes lazos con el kirchnerismo, ha sido un crítico vocal de las políticas del presidente Javier Milei, especialmente respecto a la gestión de Aerolíneas Argentinas. Recientemente, advirtió que “si el Gobierno se carga a Aerolíneas, nos van a tener que matar”, lo que provocó aún más tensiones con la administración libertaria.

El paro también dejó al descubierto algunos privilegios que disfrutan los sindicalistas aeronáuticos. Mogetta señaló que los reclamos del gremio no están alineados con la realidad económica del país y criticó a los dirigentes por defender “privilegios inaceptables” como los viajes gratuitos en clase ejecutiva. “Más casta que los pilotos no hay”, afirmó el funcionario, reflejando la postura del gobierno libertario en su lucha contra las “castas” políticas y sindicales.

Además, el Gobierno está trabajando en la implementación de la “esencialidad”, una política que garantizará que, incluso en medio de conflictos laborales, se mantenga operativa al menos el 50% de los vuelos programados. Esta medida, que será formalizada en el próximo Boletín Oficial, prevé sanciones severas para quienes no cumplan con sus obligaciones, incluyendo el despido.

Los pasajeros como rehenes del conflicto

El paro ha afectado exclusivamente a Aerolíneas Argentinas, mientras que el resto de las aerolíneas, tanto nacionales como internacionales, han operado con normalidad. Esto ha generado una fuerte crítica por parte del Gobierno, que condena el uso de los pasajeros como “rehenes” en la disputa sindical. Para mitigar el impacto, Aerolíneas ha habilitado cambios de pasajes sin costo, aunque la solución no es suficiente para los miles de afectados.

El presidente Milei y su equipo han insistido en que la política de “cielos abiertos” será clave para terminar con los monopolios y privilegios que han dominado el sector durante años, y que esta es una de las razones por las que el conflicto con los gremialistas se ha intensificado.

Mogetta subrayó: “Estamos rompiendo con estructuras monopólicas que solo han servido para enriquecer a unos pocos a costa del Estado y de los pasajeros”.