viernes, marzo 29

El gobierno nacional compró 600 toneladas de polenta para calmar los reclamos sociales

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La compra se llevará adelante a través de la dirección General de Administración (DGA) del ministerio de Desarrollo Social de la Nación. El escenario económico que atraviesa la Argentina, con la pandemia de coronavirus aún en curso, no pareciera estar acompañado de buenos augurios. Con más del 50% de los niños en situación de pobreza y en medio de un contexto de desempleo récord, varias familias alrededor del país debieron ajustar su bolsillo ante la pérdida de poder adquisitivo y resignar, incluso, algunas de las tradiciones más características de esta región como la ingesta de carne.

En ese sentido, según ha consignado RealPolitik, el Gobierno Nacional ha decidido anticiparse al futuro próximo -del cual no se establecen certezas- y en su carrera por calmar los reclamos sociales ha desembolsado una suma millonaria en la compra de más de 600 toneladas de harina de maíz: es decir, polenta.

La polémica con este alimento se retrotrae meses atrás, cuando el diputado de Juntos por el Cambio, Omar De Marchi, publicó estadísticas con respecto al comportamiento del dólar bajo la premisa “dólar mata zaraza”. En su reflexión, comparó la cotización de la moneda norteamericana y el salario mínimo durante la semana previa a las PASO 2019 y los confrontó con los mismos datos a octubre de 2020. Al respecto, el legislador mendocino concluyó: “Con Alberto Fernández sos cuatro veces más pobre que con Mauricio Macri en sólo diez meses. Polenta mata asado”.

 

 

Recientemente, el ministerio de Desarrollo Social lanzó el proceso de compra Nro. 95-0074-LPU20, que propone la adquisición de 600 mil kilos de harina de maíz para cocción rápida o precocida. La transacción se llevará adelante a través de la dirección General de Administración (DGA) del ministerio de Desarrollo Social de la Nación y supone un gasto multimillonario para el Estado.

Las más de medio millón de unidades deberán ser entregadas en envases de 1 kilo y no se distinguen los productos libres de gluten. En ese sentido, pareciera ser que la población argentina procederá de la manera que ordenó el polémico Dady Brieva a finales del 2020: “¡A comer polenta sin chistar!”.