La Casa Rosada busca disolver el fondo fiduciario que contiene el programa y estudia el procedimiento para subastar públicamente las obras.
El Gobierno Nacional avanza con la eliminación del Plan Procrear y la venta de las viviendas en construcción, con la intención de desmantelar el fondo fiduciario que financia el programa. A través de una subasta pública, el Ejecutivo pondrá a la venta las obras en proceso de edificación y liquidará aquellas que no han sido asignadas por el Estado.
El plan implica la baja del Programa de Crédito Argentino del Bicentenario para la Vivienda Única Familiar, que depende del Ministerio de Economía y está coordinado por la secretaría de Desarrollo Territorial, Hábitat y Vivienda. El Gobierno asegura que cumplirá con los créditos en curso, pero el destino de las viviendas no finalizadas está en manos de una serie de decisiones jurídicas que están siendo trabajadas por una mesa técnica.
De acuerdo a fuentes oficiales, el Gobierno buscará que el Tribunal de Tasaciones de la Nación establezca el precio de las propiedades, para luego subastarlas a través del portal de ventas de la Administración de Bienes del Estado (AABE). El fondo fiduciario, creado en 2012 por la expresidenta Cristina Kirchner y relanzado en 2020 por Alberto Fernández, se administra por el Banco Hipotecario y está compuesto por los bienes transferidos por la AABE y fondos del Tesoro Nacional.
Este movimiento es parte de una revisión más amplia que lleva a cabo el Gobierno sobre todos los fondos fiduciarios nacionales, que ya ha llevado al cierre de varios fondos, como el FONCAP, el Fondo Nacional de Emergencias y el Fondo de Protección Ambiental de los Bosques Nativos.