El representante argentino en laONU contradijo aAlberto por los derechos humanos enVenezuela

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La postura del país ante el organismo internacional fue muy distinta a la que planteo el Presidente cuando desestimó las denuncias por violaciones a los DD.HH.

Luego de la declaración en apoyo al régimen de Nicolás Maduro, por parte del presidente Alberto Fernández, en donde sostuvo que “ya no existen” denuncias contra los derechos humanos en Venezuela, la Argentina reconoció ante la ONU el informe de Michelle Bachelet que repasa las acusaciones actuales contra el gobierno bolivariano.

El representante diplomático de la delegación argentina en la sede las Naciones Unidas en Ginebra, Christian Matías Machuca comentó: “Agradecemos a la Alta Comisionada por la presentación de su informe que da cuenta que la situación de derechos humanos en Venezuela continúa siendo crítica”.

Además pidió por el “levantamiento de las sanciones unilaterales para contribuir a aliviar las necesidades de los segmentos más vulnerables de la población”, en el mismo sentido, el representante argentino instó a Maduro a abrir “una oficina de la Alta Comisionada” en Venezuela.

La presentación se dio en el marco de una sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, que la Argentina preside a través del embajador Federico Villegas, máxima autoridad de la delegación en Ginebra. En esta ocasión Machucha representó al país en reemplazo del propio Villegas.

Ayer por la noche Alberto Fernández había comentado que “las cosas en Venezuela mejoraron muchísimo” para luego rematar que las denuncias por violaciones a los derechos humanos contra Maduro “ya no existen”.

Esa declaración del mandatario generó una inmediata respuesta de la organización internacional Human Rights Watch (HRW), que cuestionó de “¿Ignorancia o selectividad?”, la postura del presidente argentino.

Mientras tanto, en la previa de la reunión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, Bachelet aseguró que en distintas investigaciones en Venezuela entre marzo de 2021 y abril de este año su equipo “documentó 166 restricciones indebidas, incluidas la estigmatización, la criminalización y las amenazas contra las voces disidentes”.