Eliud Kipchoge, histórico: es el primer hombre en correr una maratón en menos de 2 horas

0
502
El keniata, campeón olímpico en Río 2016, logró lo que nunca antes se había conseguido: bajar de la marca de dos horas en una maratón de 42 kilómetros.El atleta keniata Eliud Kipchoge se convirtió este sábado en el primer hombre en cruzar la mítica barrera de las dos horas en una maratón. El africano completó el recorrido de 42,195 kilómetros en un tiempo de 1:59:40.2.

“Soy un hombre muy feliz por haber podido correr en menos de dos horas y por poder inspirar a la gente. Ningún humano tiene límites, puedes hacerlo. Espero que más atletas en el mundo corran en menos de dos horas después de hoy”, indicó el keniata que está próximo a cumplir 35 años una vez que finalizó el desafío.

La carrera que marcó la historia para Kipchoge y el atletismo mundial fue seguida minuto a minuto en Kenia, donde miles de personas se juntaron en las calles de diferentes ciudades del país africano para ver a su hijo pródigo batir el récord en la maratón.

«Todos pueden salir por la puerta y correr para hacer un gran mundo. Todos podemos hacer de este mundo un lugar hermoso para vivir”, dijo el keniata, que le envió un saludo especial a la gente de su país. “Esto significa mucho para Kenia”, concluyó.

Sin embargo, a pesar de la emotividad, el récord no es reconocido oficialmente por la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) ya que la carrera estuvo diseñada a medida para permitir la gesta.

Es decir que, gracias a detalles que se establecieron para que Kipchoge pudiera romper la barrera de las dos horas, la competencia no fue homologada por la asociación.

El desafío, que tuvo lugar en la antigua reserva de caza del Prater, en el centro de Viena, Austria no escapó de las críticas, al ser considerado por algunos como un evento más mediático y comercial que deportivo.

Para situar al campeón en las mejores condiciones, el patrocinador del evento no dejó nada librado al azar y le fue dando ciertas «ventajas» a Kipchoge.

La más notoria, es la de que sus entrenadores se acercaban en bicicleta para alcanzarle agua y geles energéticos, una práctica diferente a la de las maratones competitivas. Y también un auto guía le proyectaba sobre la pista con luz fluorescente el recorrido ideal a seguir.

Debido a esas condiciones particulares la carrera no fue homologada por la Federación Internacional de Atletismo (IAAF).