viernes, marzo 29

EVANGELIO DEL DÍA

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EVANGELIO DEL DÍA🌾
susurra. R/.

Sin que hablen, sin que pronuncien,
sin que resuene su voz,
a toda la tierra alcanza su pregón,
y hasta los límites del orbe su lenguaje. R/.
Evangelio de hoy
Lectura del santo evangelio según san Juan (14,6-14):

En aquel tiempo, dijo Jesús a Tomás: «Yo soy el camino, y la verdad, y la vida. Nadie va al Padre, sino por mí. Si me conocéis a mí, conoceréis también a mi Padre. Ahora ya lo conocéis y lo habéis visto.»
Felipe le dice: «Señor, muéstranos al Padre y nos basta.»
Jesús le replica: «Hace tanto que estoy con vosotros, ¿y no me conoces, Felipe? Quien me ha visto a mí ha visto al Padre. ¿Cómo dices tú: «Muéstranos al Padre»? ¿No crees que yo estoy en el Padre, y el Padre en mí? Lo que yo os digo no lo hablo por cuenta propia. El Padre, que permanece en mí, hace sus obras, Creedme: yo estoy en el Padre, y el Padre en mí. Si no, creed a las obras. Os lo aseguro: el que cree en mí, también él hará las obras que yo hago, y aún mayores. Porque yo me voy al Padre; y lo que pidáis en mi nombre, yo lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si me pedís algo en mi nombre, yo lo haré.»

Jn. 14, 6-14: Conocer al Padre.

1) El conocer: la religión es una fórmula de conocer a Dios. Esto permite re-ligarte a esa presencia de Dios y conocerlo. El conocimiento de Dios no es un conocimiento que marca solo lo intelectual o leyendo un manual. El conocimiento de Dios es integral y asume tu persona y todo tu ser. Hoy Dios te propone crecer a su lado y conocerlo de una manera viva e íntima, en donde están solo vos y Él.

2) Las obras: la vida cristiana, la vida de aquel que conoce a Jesús, marca una acción concreta. No me podés ser cristiano solo los domingos de 20 a 21hs que vas a misa. Debes ser cristiano siempre y dar ejemplo con tu vida siempre. Sé que es difícil, hasta a mí me cuesta porque no es fácil ser coherente con lo que decimos. Por eso es una gracia y un don de Dios.

3) Dios hace: nosotros somos simples instrumentos y es Dios quien obra y nos mueve a un camino eterno. Te invita a vivir y a luchar día a día por aquello que amas y te ilusiona.

Viví con Dios, por Dios y para Dios.