EVANGELIO DEL DÍA

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EVANGELIO DEL DÍA 🌾

Lucas (4,38-44):

En aquel tiempo, al salir Jesús de la sinagoga, entró en casa de Simón. La suegra de Simón estaba con fiebre muy alta y le pidieron que hiciera algo por ella. Él, de pie a su lado, increpó a la fiebre, y se le pasó; ella, levantándose en seguida, se puso a servirles. Al ponerse el sol, los que tenían enfermos con el mal que fuera se los llevaban; y él, poniendo las manos sobre cada uno, los iba curando.
De muchos de ellos salían también demonios, que gritaban: «Tú eres el Hijo de Dios.»
Los increpaba y no les dejaba hablar, porque sabían que él era el Mesías. Al hacerse de día, salió a un lugar solitario. La gente lo andaba buscando; dieron con él e intentaban retenerlo para que no se les fuese.
Pero él les dijo: «También a los otros pueblos tengo que anunciarles el reino de Dios, para eso me han enviado.»
Y predicaba en las sinagogas de Judea.

Palabra del Señor
🌾MEDITACIÓN DEL EVANGELIO 🌾

Lc. 4, 38-44:

🌾Jesús cura tus dolencias.

1) Hacer algo por ella:

La suegra de Pedro estaba mal, la fiebre te lleva a no reconocer, delirar y perder la realidad. Cuantos estamos con este mal «la fiebre espiritual» que no te deja ver la realidad, que estás delirando, que no sabes dónde estás parado e incluso se debilita todo en vos. Hoy Jesús quiere sanarte para que pase de vos esta mirada a tu realidad, que puedas buscar en tu vida esa paz que da Él.

2) La multitud:

Cuantos te rodean y te marean, pero también cuantos te necesitan. Mira tu misión y por dónde vas caminando en tu vida. Siempre habrá necesidades a tu alrededor. El problema es si vos te pones como el mesías, el salvador, el que tiene o la que tiene que resolver el problema de todos. Uno puede ayudar, pero también debe recordar su misión. Jesús sana y ayuda, pero marca que tiene un tiempo porque su misión sigue. Mira tu camino y objetivo, no sea que estés detenido en un mesianismo que vos mismo te pusiste, de querer salvar a todos, pero no salvando tu objetivo en este mundo.

3) El Desierto:

Cuán importante es tu momento de soledad. El lugar donde vos pares la pelota de tu vida y mires bien el todo de tu realidad, que sepas por dónde estás caminando y hacia dónde estás yendo con tu vida. Jesús después de allí aclara que tenía que seguir, no se puede quedar, incluso ante un «éxito rotundo». Pero aquí importa más tu misión en el mundo y a lo que viniste, porque es eso lo que te hará feliz. Momentos exitosos aparecen, pero tarde o temprano eso termina, en cambio tu misión en este mundo terminará con vos en esta vida