viernes, abril 19

EVANGELIO DEL DÍA

0
210

EVANGELIO DEL DÍA 💫

Juan 21,1-14:

En aquel tiempo, Jesús se apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Y se apareció de esta manera:
Estaban juntos Simón Pedro, Tomás, apodado el Mellizo; Natanael, el de Caná de Galilea; los Zebedeos y otros dos discípulos suyos.
Simón Pedro les dice:
«Me voy a pescar».
Ellos contestan:
«Vamos también nosotros contigo».
Salieron y se embarcaron; y aquella noche no cogieron nada. Estaba ya amaneciendo, cuando Jesús se presentó en la orilla; pero los discípulos no sabían que era Jesús.
Jesús les dice:
«Muchachos, ¿tenéis pescado?».
Ellos contestaron:
«No».
Él les dice:
«Echad la red a la derecha de la barca y encontraréis».
La echaron, y no podían sacarla, por la multitud de peces. Y aquel discípulo a quien Jesús amaba le dice a Pedro:
«Es el Señor».
Al oír que era el Señor, Simón Pedro, que estaba desnudo, se ató la túnica y se echó al agua. Los demás discípulos se acercaron en la barca, porque rio distaban de tierra más que unos doscientos codos, remolcando la red con los peces. Al saltar a tierra, ven unas brasas con un pescado puesto encima y pan.
Jesús les dice:
«Traed de los peces que acabáis de coger».
Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red repleta de peces grandes: ciento cincuenta y tres. Y aunque eran tantos, no se rompió la red.
Jesús les dice:
«Vamos, almorzad».
Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle quién era, porque sabían bien que era el Señor.
Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo mismo el pescado.
Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a los discípulos después de resucitar de entre los muertos.

Palabra del Señor
💫MEDITACIÓN DEL EVANGELIO 💫

Jn. 21, 1-14:

💫Seguimos meditando a Cristo resucitado.

1) Una Iglesia caída:

Vemos que los muchachos estaban cabizbajos, estaban desganados, no les salía ni una. Son esos días cuando no le pegas ni una. La cabeza pasa a ser tu peor enemigo… y pasa que no reconoces a Dios. Te cuesta ver a Dios cuando tenés esos días en los que no pegas ni una. ¿Dónde estás Dios? Y Dios está, pero no lo reconoces. Estaban sin Jesús, pero con un tremendo desgano.

2) Tiren las redes:

Jesús les da la posta, les indica por dónde actuar, por dónde tienen que ir. Son esos centros que Dios te tira para que veas que Él está. Esto revoluciona a los apóstoles, lo reconocen. Porque de que no les salga ni una, pasan a ver grandezas, esto viene de Dios.

3) Pedro:

Esa pesca es la Iglesia, es ver en el primer Papa una Iglesia que misiona, que sin Jesús y sus indicaciones no logra nada. JESÚS TE PIDE QUE BUSQUES ALMAS PARA ÉL. ¡Salgamos a pescar! ¡A no desganarse! Y si no sale como queremos… a pescar de nuevo, que Jesús está. Hasta el cielo no paramos.