EVANGELIO DEL DÍA

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EVANGELIO DEL DÍA💫

Lucas 1,46-56:

En aquel tiempo, María dijo:
«Proclama mi alma la grandeza del Señor,
“se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador;
porque ha mirado la humildad de su esclava”.
Desde ahora me felicitarán todas las generaciones,
porque el Poderoso ha hecho obras grandes en mí:
“su nombre es santo,
y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación”.
Él hace proezas con su brazo:
dispersa a los soberbios de corazón,
“derriba del trono a los poderosos
y enaltece a los humildes,
a los hambrientos los colma de bienes
y a los ricos los despide vacíos.
Auxilia a Israel, su siervo,
acordándose de la misericordia”
—como lo había prometido a “nuestros padres”—
en favor de Abrahán y su descendencia por siempre».
María se quedó con Isabel unos tres meses y volvió a su casa.

Palabra del Señor
💫 MEDITACION DEL EVANGELIO💫

Lucas 1, 46-56:

💫Me llamarán feliz.

1) La grandeza:

En el transcurso de este año cuántas cosas lindas viviste… entiendo que también hay golpes, pero te invito a que ahora te detengas en esas cosas que sucedieron en este año que te animan a seguir, a luchar, a ponerle otra mirada a tu caminar. Son esas cosas que te llevan a decir “pucha, que existe Dios”. Son las cosas que te agigantan, que te hacen saber que si crees podés seguir adelante, porque siempre al fin del túnel hay luz. Alégrate en esas cosas que hoy te animan a apostar por seguir. Porque tenés que agarrarte de eso hermoso que viviste en tu vida y te lleva a un antes y un después. Eso que te alegra y te llena el alma.

2) Soberbios:

Este cántico te invita y me invita a que seamos más humildes, porque es la obra del Espíritu Santo en vos y en mí, nada es tuyo ni mío. Como dice un amigo “el que no entiende tu cansancio, es porque tampoco entiende tus alegrías” y por ahí pasa el camino de la humildad: saber que todos tenemos batallas y debemos ayudarnos mutuamente. No dejes que la soberbia te haga creer que podés todo solo. Aprende de María y le pidamos que nos ayude a confiar más en Dios, a ser serviciales y, por sobre todo, a saber que en esta vida todos la luchamos y todos nos embarramos, pero Dios siempre viene a ayudarnos.

3) Permaneció tres meses:

Que nada ni nadie te aten, vos siempre ayuda pero sin buscar que nadie sea dependiente de vos, como también quien te ayuda de corazón no te exige nada y respeta tu libertad. El servicio es desinteresado y genera alegría y paz. Por lo que en este camino no dejes de ayudar, pero también aprendamos a desprendernos. Todo tiene su límite y su tiempo. Aprende que en esta vida vos y yo debemos ayudar y desaparecer. ¡!Vamos!! Que algo bueno está por venir.