
Luego de haberse definido una suba del 7,5% -pautada para septiembre- para las jubilaciones, pensiones y asignaciones familiares, varios funcionarios comentaron que el aumento estaría por encima de la inflación.
En ese sentido, el defensor de la Tercera Edad, Eugenio Semino, expresó su indignación con respecto al incremento a otorgarse y apuntó contra aquellos que lo defienden: “Hay funcionarios que dicen que con esto se supera la inflación, es una falta de respeto”, comentó en diálogo con Radio Mitre.
Con el aumento dispuesto por el ANSeS, el haber mínimo que percibe la mitad de los jubilados del régimen general pasará de $ 16.864,05 a $ 18.128,85.

El aumento estipulado sería del orden de $1.200, lo que significaría una suba aproximada de $42 por día. En ese sentido, consideró “lamentable” el reajuste y cuestionó que el hecho de pensar ese aumento “en plena cuarentena es absurdo”.
“Ya habíamos pedido al Presidente de la Nación de llevar los mínimos, sobre todo en el período de excepción, a valores de alrededor de $ 30.000 que le permitan al jubilado no tener que salir a realizar sus changas para poder comer, como sucede ahora”, remarcó el defensor de la Tercera Edad.
Entre los años 2018 y 2019, la pérdida del poder adquisitivo de los jubilados rondó los 20 puntos. En relación a ese aspecto, Semino recordó que “la campaña electoral de la actual gestión se basó en recuperar esos puntos, pero ahora están perdiendo 15 más”.