La noche de martes tuvo al pescado y los frutos de mar como eje central del programa y Sol Pérez sorprendió a todos con su plato “simple”.

El segundo grupo de participantes de MasterChef tuvo su noche de pescado y frutos de mar. Los platos más ricos fueron los de Hernán “Loco” Montenegro, quien metió “un triple” con su sopa New England, y los fetuccini de berberechos de Sol Pérez.

Para preparar su plato, el cual finalmente le dio el nombre del chef, Sol Pérez contó con la ayuda de Donato De Santis. La participante recibió algunas críticas sobre su salsa, por lo que tuvo que volver a prepararla, pero logró amasar y sobar la masa de sus fetuccini perfectamente.

Si bien el jurado se acercó al plato con desconfianza, la degustación los conquistó inmediatamente. Germán Martitegui y Damián Betular intentaron que no se note su satisfacción, pero a ambos se les escapó una pequeña sonrisa. Donato por su parte decidió repetir el bocado y sin poder mantener el suspenso durante mucho tiempo aseguró: “Yo creo que acá tuviste muchas dificultades. ¡Pero las superaste todas!”.

“Creo que, en lo que va del certamen, es la mejor pasta en ejecución que he probado”, consideró Donato, quien destacó que Sol logró “la frescura de una pasta en la que se siente el berberecho”.

“Es la prueba de que se puede cocinar simple y muy bien. Quedate con eso hoy”, aportó Martitegui, quien felicitó a la participante por su plato.

Para cerrar la devolución y dejar a Sol “hinchada de orgullo”, Donato remarcó: “La bambina hizo la pasta della Madonna. Do, re, mi, fa, Sol”. El estudio aplaudió a la participante, que fue la primera en subir al tan ansiado balcón del certamen.