viernes, abril 19

Novak Djokovic, el villano que conquistó Wimbledon

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El serbio se impuso a Nick Kyrgios en cuatro sets para alcanzar su séptimo titulo en La Catedral y quedó a tan solo un Major de Rafael Nadal

Un nuevo día en la oficina: Novak Djokovic se coronó campeón en Wimbledon por séptima vez en su carrera tras derrotar a Nick Kyrgios por 4-6, 6-3, 6-4 y 7-6 (3) en tres horas y cuatro minutos de juego. 

El serbio demostró nuevamente ser el mejor tenista sobre el césped. Si bien comenzó el partido por debajo luego de un primer set donde presentó dificultades en la devolución (merito del australiano que fue más que regular), supo adaptarse y mejoró su servicio progresivamente a lo largo del encuentro, volviéndose un verdadero dolor de cabeza para el “Bad Boy de Canberra”. Con un bajo porcentaje de errores, logró entrar en la cabeza de su rival y cerrar el partido en el cuarto parcial, luego de un tiebreak donde tuvo cinco Championship Points.

Brazos arriba y festejo para el “Psicópata”, que cosechó su Grand Slam número 21 y quedó a tan solo un Major de igualar a Rafael Nadal, quien consiguió el 22 en la última edición de Roland Garros. También se acercó a Roger Federer, el máximo ganador de Wimbledon con 8 títulos. 

El dinero no lo motivó y tampoco le importó que el Major no sume puntos. Lo único que le interesa a Djokovic es seguir compitiendo para ser el mejor tenista de toda la historia, al menos desde los números, sin importar lo que la gente diga. Y la realidad, es que su leyenda, la del “villano del deporte blanco”, cada vez es más grande.