La historia del origen de los esmaltes

Pintarse las uñas de colores es una tradición que se remonta hasta la antigüedad. En países como la India, el concepto de manicura ya existía desde hace más de 5000 años, donde usaban la henna para darle color. En China ya se pintaban también en el 300 a.C con una mezcla de huevo, gelatina y cera de abeja.

De acuerdo con los historiadores, era símbolo de estatus y riqueza. Se dice que los nobles, personas de buena posición y riqueza, usaban colores como el oro y la plata, mientras que los menor rango, tonos como el rosado. Por otra parte, en Egipto se acostumbraba limar las uñas, y los colores para los nobles eran los rojos profundos. Se dice que Cleopatra era fan de la henna.

Fue en 1911 cuando nació la marca Cutex, fundada por Northan Warren, primera en desarrollar esta fómula líquida, dejando atrás todos los métodos que se hacían con henna. El producto se comenzó a vender hasta 1920, y consistía en una botella tapada con un corcho, que incluía un cepilla para poder aplicar el producto, además de un dispositivo para eliminar las cutículas. Con el paso de los años, las características y fórmulas fueron cambiando de acuerdo a las necesidades.

En 1920 nació la manicura, tal y como la conocemos hoy. Fue Michelle Menard quien desarrolló esta técnica. Además perfeccionó la fórmula de esmaltes para uñas de Cutex, creando la marca de Revlon.

Fue en 1950 cuando nació el acrílico para las uñas, y todo por un inesperado accidente, cuando un dentista llamado Maxwell Lappe, se rompió una en su consultorio, la que decidió arreglar con un poco de aluminio y un acrílico dental. A partir de ese entonces, creó junto a su hermano la fórmula que hoy permite que podamos hacernos uñas acrílicas.

Para 1976 se puso de moda la manicura francesa cuando Jeff Pink, fundador de Orly, necesitaba algo que combinara con cualquier atuendo que se pusiera. Sin embargo el pegamento usado en aquella época no era resistente al agua y no duraron mucho. No será hasta 1978 cuando se introducen las uñas acrílicas, inventadas por el dentista Fred Slack en 1954.