jueves, abril 18

Préstamos bancarios: quién es el enemigo que los hace tan caros

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Un informe de Adeba revela que tres intendencias cobraron tasas por más de $ 5 millones por cada sucursal en enero pasado. Y un extra de $ 80.000 mensuales por cada cajero automático.

Préstamos bancarios: quién es el enemigo que los hace tan caros

Tres municipios cobraron tasas municipales por más de $ 5 millones por cada sucursal bancaria en enero pasado, según indicó un informe de la Asociación de Bancos de la Argentina (Adeba)

Además, la entidad relevó otros 42 municipios (mayormente en la provincia de Buenos Aires) que cobraron tasas municipales entre $ 1 millón y $ 5 millones mensual por cada sucursal. 

En 25 distritos cobraron entre $ 500.000 y $ 1 millón por cada sucursal. El peso de las tasas municipales son uno de los costos más significativos de la operatoria bancaria.

Para poner en perspectiva el peso de las tasas, basta con decir que, en los tres municipios más gravosos, la tasa municipal que paga una sucursal es superior a 50 salarios bancarios de nivel inicial. 

En los municipios «intermedios» el promedio es de 30 salarios básicos. Una sucursal típica tiene entre 7 y 12 empleados. En otras palabras, los bancos les pagan mucho más a los municipios que a sus propios empleados.

Además, está el cobro adicional que realizan algunos municipios a los bancos por cada ATM o terminal de autoservicio que poseen en las sucursales. Existen municipios en la provincia de Buenos Aires que cobran un extra del orden de $ 80.000 mensuales por cada cajero automático que tenga la sucursal.

Adeba alertó que las tasas municipales no sólo son desproporcionadas y elevadas, también tienen una tendencia creciente a lo largo de los años. Analizando tan sólo los 20 municipios que cobran mayores tasas, se registraron alzas de hasta 300% en un año.

Desde la asociación de bancos nacionales advierten que esta medida no sólo encarece los servicios financieros y atenta contra la inclusión financiera, sino que también dificulta la expansión y mantenimiento de parque de cajeros automáticos. Cuantos más cajeros se instalen en una sucursal, más se deberá pagar de tasas municipales.

«En aquellos municipios donde la presión fiscal sobre las sucursales y cajeros automáticos resulta desproporcionada, es esperable ver menor presencia de las entidades financieras. En contraposición, seguramente se vean más cajeros automáticos y sucursales en aquellos municipios cuyas tasas municipales guarden relación con los servicios prestados», señala Javier Bolzico, presidente de Adeba.

Desde la institución, entienden que exorbitantes y crecientes tasas municipales encarecen los préstamos y demás servicios bancarios. Esto afecta negativamente la actividad financiera y el resto de las actividades de comercio y producción.

Aseguran que las elevadas tasas municipales atentan directamente contra la bancarización e inclusión financiera. El costo de estas tasas eleva tan significativamente los costos de una sucursal bancaria, que desalienten la apertura de sucursales e instalación de cajeros automáticos o terminales de autoservicio. 

Por ello, los más perjudicados por las altas tasas que los imponen municipios a las sucursales bancarias, son justamente los propios habitantes del municipio.

«Fijar las tasas municipales en niveles razonables, sería un importante aporte de los municipios a la inclusión financiera y a disminuir el costo de los servicios bancarios, incrementando así la actividad económica local y el empleo privado en sus jurisdicciones», esgrimen en Adeba.