Los jueces Gustavo Hornos y Mariano Borinsky no se apartarán del caso, y en cambio aceptaron la excusación de su colega Javier Carbajo.

La Cámara Federal de Casación Penal, integrada por los jueces Gustavo Hornos y Mariano Borinsky, rechazó las recusaciones formuladas por las defensas de Cristina Fernández de Kirchner y Nelson Periotti y ratificó la intervención de la Sala IV en el caso en la causa denominada como Vialidad y por la cual la vicepresidenta fue condenada por fraude.

El Tribunal Oral Federal dio a conocer en marzo los fundamentos de las condenas impuestas a Cristina Fernández de Kirchner, Lázaro Báez, José López y otros funcionarios por el delito de fraude a la administración pública. Las defensas recurrieron esas condenas y el fiscal Diego Luciani recurrió la absolución por el delito de asociación ilícita por el que había acusado durante el juicio.

Los jueces de casación desestimaron de plano las recusaciones por improcedentes. En el fallo, señalaron que los motivos de recusación eran insinuaciones conjeturales y especulativas y citaron la inveterada jurisprudencia de la Corte Suprema que indica que los magistrados deben rechazar las sospechas de alegada, no probada y desestimada parcialidad y cumplir con su deber jurisdiccional.

Ante las alegaciones de prejuzgamiento referidas por la defensa, a partir de diversos fallos dictados por la Sala IV en las etapas previas de este proceso, refirieron que es la primera vez que están llamados a resolver sobre cuestiones de fondo y que todas las intervenciones anteriores se trataba de incidencias en las que, justamente, rechazaron la intervención porque los recursos se dirigían contra sentencias no definitivas.

Por su parte, el juez Carbajo se inhibió de continuar interviniendo. Argumentó que al juzgar en el caso “la ruta del dinero K” ya había expresado, en soledad, que el dinero lavado por Lázaro Báez provenía de la corrupción de la obra pública.