Según el fallo la defensa de la ex mandataria no presentó fundamentos suficientes para que se aparte a los fiscales y jueces de la investigación.

Malas noticias para Cristina Kirchner, en el marco de la causa que investiga irregularidades en la obra pública de Santa Cruz, y que la tiene como principal imputada, ya que la Cámara de Casación, desestimó le pedido de recusación para los jueces y fiscales, pedido por la defensa de la Vicepresidenta.

De este modo, el máximo tribunal penal, rechazó el recurso de queja presentado por la ex mandataria, para la recusación de los jueces del Tribunal Oral Federal Nro. 2 (TOF2), que lleva adelante la investigación en la causa conocida como vialidad, Rodrigo Giménez Uriburu y Jorge Gorini.

Al mismo tiempo, que ratificó a los fiscales del caso Diego Luciani y Sergio Mola, a quienes la defensa de Cristina, había acusado de estar influenciados por contactos políticos con Mauricio Macri, presentando como pruebas notas periodísticas e imágenes del medio Página 12.

El fallo firmado por los jueces Mariano Borinsky, Javier Carbajo y Gustavo Hornos, señaló que “por regla general, las resoluciones que deciden acerca de recusaciones no son susceptibles de ser impugnadas ante esta instancia. Pues, no se trata de la sentencia definitiva de la causa, ni tampoco de alguna equiparable a ella”.

Además, resaltaron que la defensa de la Vicepresidenta, “no ha logrado demostrar, ni se advierte en el estado actual del proceso, la existencia de un perjuicio de imposible o tardía reparación ulterior o una cuestión federal debidamente fundada”, que permita considerar el caso como una excepción y habilitar la intervención de la Casación.

Ante esto, concluyeron de manera unánime, “no hacer lugar a la queja interpuesta por la defensa particular de Cristina Fernández de Kirchner, sin costas en la instancia”. Sin embargo, la defensa puede elevar el pedido de recusación a la Corte Suprema de Justicia y esperar una resolución favorable, en esa instancia.

Los pedidos de apartamiento de los magistrados intervinientes en la causa, fueron llevados a cabo por el abogado de la titular del Senado, Carlos Beraldi, quien había cuestionado a Giménez Uriburu y a Luciani porque habían jugado al futbol juntos en el mismo equipo amateur, en un torneo en la quinta Los Abrojos, que pertenece a la familia Macri.

Ante este pedido, se sumaron los abogados defensores de Julio De Vido, Carlos Santiago Kirchner, Lázaro Antonio Báez y Nelson Guillermo Periotti, todos imputados por integrar una asociación ilícita, junto con Cristina Kirchner.