Seis objetos para ayudarte a dormir

Después de un día duro, una de las peores cosas es ver pasar los minutos y las horas mientras tratás de dormir o despertar luego de varias horas agotado. A continuación, seis objetos que podés probar para solucionar este problema.

Antifaz para dormir

Para descansar mejor es recomendable evitar todo tipo de luces, y un antifaz para dormir te asegurará eliminarlas por completo. Existen diseños muy variados. Conviene elegir uno de un material ligero y respirable que asegure una buena sesión de reposo.

Cortinas blackout

Están pensadas para bloquear la luz, pero también ofrecen otros beneficios como reducir el ruido del exterior y regular la temperatura del cuarto (no deja pasar el calor o frío extremo). La entrada de luz varía según el color que elijas; entre más oscura sea la tela, más luz podrá bloquear.

Tapones para los oídos

Para dormir mejor es necesario que disminuyas al máximo todo ruido que hay a tu alrededor, y la mejor forma para hacerlo son los tapones. Los hipoalergénicos de silicona no lastiman la piel y se pueden reutilizar después de lavarlos. Además, por su diseño y flexibilidad, pueden introducirse fácilmente en el canal auditivo.

Lámpara de lectura

Una forma de reducir la luz mientras llega el sueño es tener una lámpara con diferentes rangos de intensidad al lado de tu cama. Existen lámparas que ofrecen diferentes niveles de brillo y colores de luz.

Máquina de ruido blanco

El ruido blanco es una señal de sonido que contiene todas las frecuencias a la misma potencia, de manera que se satura el umbral auditivo y el oído es incapaz de percibir el ruido. Existen máquinas que además de emitir este tipo de frecuencias, cuenta con otras opciones, como canciones de cuna para bebés, sonidos de la naturaleza, ruido rosa y marrón.

Aceites esenciales

Los relajantes actúan sobre el sistema nervioso autónomo y ayudan a recuperar el sueño reparador. Los más recomendados son los de mandarina, manzanilla romana, lavanda y mejorana.

Se pueden aplicar por vía tópica, sobre la piel, aplicando una gotita sobre las muñecas o en el cuello. Para ello, tendrás que diluirlo en alguna crema, sérum, agua o aceite. O por vía atmosférica, mediante un difusor, se añaden un par de gotas del aceite en agua caliente para inhalar el vapor.

Fuente: Vix