Un ingeniero informático se deshizo de un disco rígido en el que tenía las claves de acceso a su cuenta. Ahora invierte una fortuna para encontrarlo

El ingeniero informático inglés James Howells, hace unos diez años, tiró a la basura un disco duro en el que almacenaba una verdadera fortuna en Bitcoins. Pese al paso del tiempo y a todos los esfuerzos que ha hecho para tratar de recuperarlo, no se da por vencido, lo cual fue ratificado recientemente pues recurrió a la NASA y a perros robot para tratar de desterrar el el inmenso basural donde cree que puede estar el tesoro.

De esta manera, la arriesgada estrategia de Howells de buscar una aguja en un pajar sigue en pie, con el único objetivo de encontrar el disco duro que tiró durante la limpieza de su hogar sin recordar el contenido millonario que tenía y que había minado: 8.000 Bitcoins, que en sus mejores momentos llegaron a valer más de 500 millones de dólares, y que hoy son unos 185 millones.

A poco de descubrir su garrafal error, este ingeniero comenzó a elaborar una estrategia que le podría costar unos u$S12 millones, con el único objetivo de excavar en un basural de la localidad inglesa de Newport para encontrar el «tesoro» perdido.

La búsqueda traía consigo también una promesa en caso de recuperar el disco duro extraviado, y es que el ingeniero ofreció el 10% de las ganancias para construir un centro de criptomonedas en el país británico.

El accidente ocurrió en 2013, después de haber minado 8.000 Bitcoins en las primeras etapas de desarrollo de la moneda.

Para la arriesgada misión, Howells señaló que sería una búsqueda sin «daños» ambientales y prometió que será «beneficiosa» para la ciudad de Newport, pese a lo cual las autoridades locales le prohibieron el paso en numerosas ocasiones por suponer un «alto» riesgo ecológico.

El ingeniero contrató a la NASA para poder recuperar el disco duro. El operativo le costaría unos u$s12.000.000

Tiró su PC a la basura con 8.000 bitcoins y la busca con la NASA

En una primera instancia, el ingeniero explicó que había contratado a un especialista en inteligencia artificial y a un equipo ambiental. Hoy por hoy, sus esfuerzos por encontrar el tesoro llegan más lejos y sin límites.

Por esta razón, y dentro de su presupuesto de 12 millones de dólares, ha contratado los servicios de Phil Bridge, un experto vinculado con la NASA en la recuperación de datos del transbordador espacial Columbia tras su desintegración.

También, ha solicitado perros robot Spot de Boston Dynamics, para rastrear en la zona a través de un escáner para intentar localizar el disco duro.

«Esta es la operación más profesional que hemos montado. Es una propuesta seria, somos capaces de completar esta tarea a un nivel muy alto», señaló Bridge al diario The Times. «He visto datos recuperados en las circunstancias más inusuales que puedas imaginar», sentenció.

. «De sistemas que fueron destruidos por inundaciones o quemados por el fuego, incluso de dispositivos que fueron alcanzados por un rayo», asegura.

Según explica The Times, parece ser que el equipo de Bridges ha conseguido identificar la probable ubicación del disco duro en una zona donde se enterraron más de 15.000 toneladas de desechos entre agosto y noviembre de 2013.

Si encuentra el disco duro, el ingeniero se quedará con un tercio de los millones y repartirá el resto entre los inversores

El ayuntamiento argumenta que el disco duro debe estar enterrado a unos 15 metros de profundidad.

Con la ayuda de este experto de la NASA, a la que se le añaden dos perros robot Spot de Boston Dynamics, ellos creen que se puede recuperar la fortuna de Bitcoin.

Howells afirma que, si encuentra el disco duro, se quedará con un tercio de los millones y repartirá el resto entre los equipos de excavación y los inversores, así como entre la población local, a la que dará 55 euros en Bitcoin a cada uno.