“Queremos hacer valer nuestros derechos: preservar nuestra fuente de trabajo, ser oídos y decir basta a los atropellos de las patotas sindicales. Somos trabajadores y queremos ejercer nuestro derecho con total libertad y sin miedo”, señalaron. “Estamos a merced de sindicalistas inescrupulosos”, denunciaron más tarde.
El conflicto se originó a partir del despido de cinco empleados de la empresa, tres de los cuales pertenecen al Sindicato de Camioneros. La situación había requerido la mediación de Fernando Gray, intendente de Esteban Echeverría, donde está situada la firma de insumos químicos.
En la pulseada, la primera acción fue una denuncia penal por parte de la empresa para que se permita el ingreso y salida de los camiones de la planta. Como respuesta, el sindicato realizó una denuncia sobre las condiciones de trabajo dentro de la empresa, entre lo que detallaron la falta de sanitarios. Hace un año el establecimiento sufrió un incendio y actualmente los operarios utilizan baños químicos.
“Estamos en una situación lamentable. La empresa tiene 64 años, la fundó mi padre y nunca cambió de nombre. Nos obligan a reincorporar a trabajadores despedidos que nos amenazaron con un sabotaje a la planta. Nosotros somos proveedores de la industria de la alimentación y tenemos que tener mucha confianza en el personal. Hay testigos que dijeron que los despedidos si vuelven a entrar quieren pudrir todo”, explicó Ignacio Dos Reis, dueño de la empresa.
La abogada y dirigente del PRO, Florencia Arietto, representa a la empresa y despotricó contra el personal afectado por los despidos: “¿Cómo se puede trabajar con personal que te puede cambiar una bolsa o adulterar un insumo y genera un estrago en la población que consume los productos alimentarios?”.
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5 noviembre, 2024