Según un informe privado una familia necesitó casi 140 mil pesos para cubrir las necesidades alimenticias básicas durante el mes de agosto. Los precios se aceleraron después de las PASO.

La inflación en alimentos dio un fuerte salto en el mes de agosto, es que luego de la devaluación del 22% que hizo el Gobierno el día posterior a las elecciones primarias, los precios se dispararon en hasta un 30 por ciento en tan sólo unos días. Logrando que el salario mínimo ya no alcance a cubrir las necesidades alimenticias de una familia.

Así se desprende del relevamiento realizado por el Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (ISEPCi), que determinó que la canasta básica de alimentos en el Conurbano Bonaerense sufrió un incremento del 27% durante el octavo mes del año, mostrando una suba interanual del 167,05%.

Según la entidad, a partir de la encuesta que llevan adelante desde el Índice Barrial de Precios (IBP), en comercios de cercanía de los barrios populares de veinte distritos de esta región del Gran Buenos Aires, una familia compuesta por dos adultos y dos niños, requirió de 139.789,65 pesos para poder cubrir los gastos alimenticios básicos.

Lo que representa una suba de $29.710,39 para adquirir los mismos productos que en el mes anterior. La cifra ya supera al Salario Mínimo, Vital y Móvil para septiembre, que alcanza los 118.000 pesos. Es decir que una familia tipo necesita más de un sueldo para poder sobrevivir en territorio bonaerense.

Otro de los datos que muestra el documento, incluye a la Canasta Básica Total, que contempla gastos en educación, salud, vestido, transporte, tarifas y otros, que también tuvo un incremento mensual del 26,99%, y en la suma interanual de un 164,67%.

Por lo que, el costo para una familia compuesta por cuatro personas, por primera vez superó la barrera de los 300 mil pesos, ya que en agosto requirió de  311.730,92 peso. Lo que suma unos $66.254 más que en el mes de julio.