La medida fue un día horas después de que se conociera oficialmente la decisión del Gobierno de congelar hasta el 31 de diciembre los pagos de la deuda nacional emitidos en dólares bajo ley nacional.
Según indica el diario Clarín, el cambio pone más presión sobre el Gobierno en medio de la negociación con los acreedores.
Desde Economía dicen que la calificación se debería volver a corregir, obviamente, cuando se llegue a un acuerdo con los bonistas que tienen en su poder títulos en dólares (ley extranjera) por casi 69.000 millones de dólares.
“No eliminaremos a Argentina de Selective Default (SD) en el corto plazo, tanto la calificación en moneda local como la deuda en moneda extranjera se mantendrán allí”, dijo el director de calificaciones soberanas de S&P, Sebastian Briozzo, quien agregó que deben evaluar la oferta de deuda argentina a los acreedores antes de modificar la calificación.