Se sumaron 60 hectáreas. Anoche pararon el operativo.

Aseguran que no corren riesgos las antenas del cerro 20 de Febrero. J. Corbalán

Según el reporte oficial del Ministerio de Seguridad de la Provincia, ayer eran 150 las hectáreas afectadas por el fuego en el cerro 20 de Febrero. El lunes, en tanto, se había precisado que eran 90 hectáreas. Ayer se vivió otro día complicado con más focos ígneos.

Los bomberos que trabajaban en la zona pedían a la población no acercarse y tampoco ir al cerro San Bernardo. Explicaron que había «fuego subterráneo», es decir, en las raíces de árboles y en el mantillo. Estimaban que el trabajo se extenderá por lo menos hasta hoy.

Al cierre de esta edición los bomberos se abocaron a realizar la denominada «guardia de cenizas». Frenaron los trabajos ya que de anoche no podían continuar para preservar la vida de los brigadistas.

Hoy llegarán a la zona unos 30 brigadistas del Servicio Nacional del Manejo del Fuego y otra nave hidrante como refuerzo.

Frida Fonseca, secretaria de Seguridad de la Provincia, dijo a El Tribuno que los trabajos se retomarán hoy a las 7. Informó que se hará un relevamiento de la vegetación, pero dijo que no se ve un daño irreversible. Sostuvo que tampoco se encontraron animales quemados. «Tuvieron margen de tiempo para irse, sobre todo las pavas del monte», añadió.

La funcionaria contó que se pudo frenar el incendio que tomaba dirección hacia Tres Cerritos, en la zona de un club. «Hay que destacar que los focos se inician en forma intencional», dijo.

Jorge Altamirano, secretario de Protección Ciudadana de Municipalidad de Salta, destacó el trabajo coordinado de todos los cuerpos involucrados. Dijo que ayer no había riesgo en la zona de las antenas y que las viviendas estaban fuera de peligro. No obstante, remarcó que se debe tener en cuenta las condiciones de cada día.

Hace diez años los cerros 20 de Febrero y el San Bernardo fueron afectados por otros dos incendios, el 18 de septiembre de 2012 y el 15 de octubre de ese año. En total fueron afectadas más de 120 hectáreas.

En la edición del 16 de octubre de 2012 El Tribuno publicó: «Vientos con efecto Zonda hicieron revivir en la víspera aquellas angustiantes imágenes, aunque esta vez los focos de incendio fueron menos, como también los daños materiales y los casos de emergencia atendidos en distintas localidades del Valle de Lerma.

Además de los incendios, favorecidos por las condiciones ambientales, pero atribuidos a hechos intencionales, conductas desaprensivas y desidia, hubo cortes en cableados, algunas voladuras de chapas y postes eléctricos desestabilizados en la Capital y localidades vecinas».