Calvete está acusado de ser el organizador “paraestatal” del direccionamiento de contratos en la Agencia Nacional de Discapacidad.

Miguel Ángel Calvete, de 60 años y conocido por haber sido vocero de los supermercados chinos y concejal de Cambiemos en La Matanza, fue detenido con prisión preventiva ordenada por el juez Sebastián Casanello como presunto jefe de una asociación ilícita.

Calvete está acusado de ser el organizador “paraestatal” del direccionamiento de contratos en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS). El perfil del acusado, que se movía con “siete chapas distintas para su camioneta último modelo” para evitar multas, se complejiza por su historial judicial.

Se reveló que Calvete había cumplido una condena a cuatro años de prisión dictada en 2019 por el Tribunal Oral Criminal N°8 por el delito de explotación económica del ejercicio de la prostitución ajena. El fallo detalló que, entre 2015 y 2016, los imputados facilitaron la prostitución de mujeres a quienes asignaban departamentos en Buenos Aires. A cambio, les exigían un “rédito económico por sobre los valores de alquiler de mercado y con condiciones contractuales leoninas”, según el fallo.

La investigación sobre la trama ANDIS reveló un emporio económico de Calvete. La Policía de la Ciudad secuestró 600 mil dólares de una de sus casas, dinero que él reclamó desde la cárcel a Casanello, asegurando que pertenecía al Instituto de Desarrollo Económico y Comunitario (INDECOMM) y que “no tiene” que ver con ANDIS; pedido que fue rechazado por el juez. Calvete está vinculado a múltiples droguerías y empresas proveedoras de insumos a ANDIS, incluyendo INDECOMM S.R.L., Profusión S.A. y Profarma S.A.

La trama de corrupción incluye vínculos con exfuncionarios del gobierno de Javier Milei. Calvete tenía contacto con Daniel Garbellini, exdirector de Acceso a los Servicios de Salud, a quien, a través de su pareja, le habría entregado 5 millones de pesos para un viaje a Israel. Según fuentes empresarias, un acuerdo de cooperación con Israel en materia de discapacidad se frustró cuando “los israelíes se enteraron de toda esta trama de corrupción”.

Además, la fiscalía sostiene que Calvete tenía influencia directa con el extitular de la ANDIS, Diego Spagnuolo, y con Garbellini, a quienes “consultaba por pagos que debían ser dispuestos desde la ANDIS”. Las conversaciones telefónicas de Calvete, en las que figura con el alias “Carmela Vivaldi”, y donde pide que “bloquee al ‘pelado’” y lo pongan con “un nombre chino”, sugieren el intento de ocultar su participación. Se reveló que Spagnuolo tenía a Calvete agendado como “Chuen Li”.