El mandatario demostró su apoyo al pliego de la Cámara Alta y Figueroa podrá ejercer por 5 años más, sin embargo, anticipa un conflicto de poderes con la Corte Suprema.

Hace poco más de tres semanas, la Corte Suprema de Justicia había destituído a la jueza Ana María Figueroa por haber cumplido la edad límite establecida por la Constitución Nacional para ejercer el cargo. Sin embargo, recientemente se dio a conocer que el presidente, Alberto Fernández, dio el visto bueno al decreto de la Cámara Alta que la habilitaría a ejercer en la Cámara Federal de Casación Penal por cinco años más.

La firma de Fernández abrió un escenario en el que se marca un potencial conflicto de poderes ya que la Corte Suprema de Justicia de la Nación decidió la suspensión de la jueza por unanimidad y, como la Cámara Alta no había llegado a un acuerdo previo a su cumpleaños y la magistrada se mantenía de manera irregular en el puesto, el máximo tribunal comunicó la decisión final al Consejo de la Magistratura.

Este nuevo movimiento del kirchnerismo llegó en un último intento por recuperar la intervención de Figueroa en el caso Hotesur-Los Sauces que tiene a Cristina Fernández de Kirchner como imputada. De esta manera, con el paso faltante para dar fin al trámite del pliego de la Cámara de Senadores, el Consejo recibirá la firma del presidente, del ministro de Justicia y Derechos Humanos, Martín Soria, el jefe de Gabinete, Agustín Rossi y la secretaria de Legal y Técnica, Vilma Ibarra. 

Esta medida ha sido buscada por el kirchnerismo durante varios meses, ya que Figueroa tenía a su cargo el expediente que acumuló los casos Hotesur-Los Sauces, que involucran a la vicepresidenta Cristina Kirchner y a su hijo, Máximo. De esta manera, si Figueroa regresa a Casación, el kirchnerismo lograría ocupar esa vacante en el máximo tribunal penal del país por al menos cinco años más.

Mientras tanto, en el alto tribunal sostienen que el tema Figueroa es un “asunto concluido” tras la decisión de desvincularla del 6 de septiembre y que no parecen haber nuevos elementos que cambien aquella decisión. Sin embargo, la definición la tendrá la misma Cámara Federal de Casación, que resolverá cómo encarar este nuevo escenario.

Desde el punto de vista judicial, las consecuencias de esta decisión sobre los casos Hotesur y Los Sauces pueden ser significativas y podrían incluso afectar la capacidad de la actual Corte Suprema para pronunciarse sobre el caso, dado que destituyó a Figueroa.