Están preocupados por la seguridad de sus hijos. Los detalles.

La escuela Arturo Oñativia 4.045, situada en la zona oeste, se encuentra en el centro de una controversia tras la denuncia de un presunto intento de abuso por parte de un grupo de alumnos de sexto grado hacia un estudiante de primer año. La denuncia se originó luego de que una maestra de jardín descubriera a los menores con los pantalones bajos, tanto los presuntos agresores como la víctima, y de inmediato notificara a la directora y a los padres involucrados.

La policía también fue convocada al lugar para investigar el incidente. A pesar de la gravedad de las acusaciones, la decisión de las autoridades escolares de no expulsar a los alumnos involucrados ha generado una ola de indignación entre los padres de la comunidad educativa.

Los acusados fueron suspendidos temporalmente, pero se les permitió continuar asistiendo a la institución en el turno tarde, lo que provocó una fuerte reacción de los padres de otros estudiantes. Muchos de ellos expresaron su preocupación por la seguridad de sus hijos y el temor de que puedan ocurrir otros incidentes similares en el futuro.

Los padres exigieron medidas más estrictas y transparentes por parte de la dirección de la escuela para garantizar un ambiente seguro y adecuado para el aprendizaje de sus hijos.