El director de ANSES denunció al gobierno de Alberto Fernández por malversación de $118 millones
El organismo, que depende de la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, realizó una auditoría sobre un fondo que debía ser destinado a proyectos productivos.
El director de ANSES, Mariano de los Heros, presentó una denuncia ante la Justicia Federal para que se investigue el destino de más de 118 millones de pesos que integraban un fondo que debían ser asignados a obras de desarrollo productivo y que el gobierno anterior habría asignado de manera discrecional y sin cumplir requisitos mínimos de transparencia en la ejecución.
Por una denuncia similar a esta, presentada también por el organismo que conduce Pettovello, tomó estado público el escándalo de los seguros, que salpicó a Alberto Fernández y su círculo más cercano de amigos y funcionarios.
De acuerdo con los detalles de la acusación, los fondos que habrían sido desviados a fines no previstos por la normativa vigente al momento de la comisión de los hechos “ascienden a la suma de más de 118 millones de pesos.
La denuncia, en base a lo que informó el Ministerio de Capital Humano, involucra al menos veintidós hechos ocurridos durante el gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner y podrían quedar encuadrados en los delitos de abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público, defraudación a la Administración Pública y malversación de fondos públicos.
Al respecto, De los Heros resaltó que desde el inicio de la actual gestión se viene trabajando de manera coordinada con el Ministerio de Capital Humano “en la revisión y auditoría de todas aquellas actuaciones administrativas que han comprometido fondos públicos durante anteriores gestiones” y en ese proceso “hemos encontrado varias irregularidades o inconsistencias y hemos realizado las correspondientes denuncias en cumplimiento de nuestros deberes como funcionarios públicos”.
Según se describe en la denuncia, de los 22 hechos detallados se desprende que los activos del FAE no habrían tenido como destino proyectos productivos y tampoco se habría respetado lo previsto en cuanto a dónde invertir dichos fondos, ni los principios de seguridad y rentabilidad que deben primar en toda inversión y que impedirían la utilización caprichosa de los fondos para fines distintos a los que la ley prevé”.