En el Gobierno consideran que el conflicto con los sindicalistas que promovieron la medida de fuerza, beneficia políticamente al presidente Javier Milei.
El Gobierno calculó pérdidas por más de 150 millones de dólares debido al paro de transporte impulsado este miércoles por gremios como Camioneros, Aeronavegantes, La Fraternidad, y Dragado y Balizamiento, entre otros. Pese a las pérdidas económicas, en la Casa Rosada consideran que el conflicto con los sindicatos beneficia políticamente a Javier Milei. Un alto funcionario señaló: “Para nosotros siempre es negocio pelearnos con estos pibes. Lo haríamos todos los días”.
El paro afectó servicios de trenes, subtes, aviones y camiones de carga en todo el país, aunque los colectivos continuaron operando, lo cual evitó mayores repercusiones en el comercio. La medida fue liderada por sindicalistas como Pablo Moyano, quien afirmó: “Todo el transporte le dio un mensaje al Gobierno. Los otros gremios estarán felices con este modelo de país”.
Ante la creciente presión gremial, que incluye un paro de docentes y una huelga de 36 horas de los estatales de ATE, el Gobierno mantiene frentes de conflicto con sectores estratégicos. En paralelo, busca mitigar el impacto negociando con la UTA para evitar un paro de colectivos en el AMBA el jueves. También dictó la conciliación obligatoria en la Aduana para frenar una posible paralización.
El Ejecutivo intensificó su postura pública contra los gremialistas mediante mensajes en la aplicación Mi Argentina y pantallas en aeropuertos, donde advertía que los sindicalistas no permitían trabajar. “Por medida de fuerza de los gremialistas Moyano y Biró para cuidar sus privilegios, este miércoles no habrá servicio de transporte”, fue uno de los mensajes. Esta estrategia generó críticas por parte del gremialista Pablo Biró, quien acusó al vocero presidencial de emplear tácticas extremas.
El impacto económico del paro incluyó 250 vuelos cancelados, afectando a 27 mil pasajeros. Los cálculos del Gobierno señalan pérdidas millonarias en diferentes sectores, como trenes de carga y terminales de ómnibus.