Un gran porcentaje de gente se ha encontrado alguna vez en la situación de necesitar un nuevo teléfono y una nueva línea. Los celulares son artículos tecnológicos bastante caros por más que parezcan comunes, pero su importancia es vital para cada una de las personas que debe mantener un empleo o una buena conexión con sus familiares.

Siempre dependiendo de la situación económica de cada uno, se comprará un celular más o menos accesible en términos de precio y se contratará un plan que puede ser prepago o pospago. Aunque creemos que la primera opción suele ser la más conveniente, revisaremos tanto las ventajas y desventajas de ambos.

El mayor problema que tienen estas opciones es que suelen confundir mucho a las personas que deben o necesitan contratar un servicio telefónico. Otro aspecto bastante obvio en relación a esto es que cada individuo debe conocer bien qué es lo mínimo indispensable que necesita: al fin y al cabo, el punto es gastar lo menos posible por un servicio que sea lo suficientemente bueno como para cumplir con sus responsabilidades.

En términos generales, los métodos de pago por servicios de telefonía celular son tres, chip prepago y pospago. Cada uno de ellos es conveniente para cumplir con las necesidades requeridas por una gran variedad de gente: nos referimos a que algunos poseen oportunidades económicas más amplias que otros y la elección de cómo se pagan los servicios se basan en estas diferencias.

Creemos que cuando llega el momento de elegir un nuevo plan para nuestros beneficios de comunicación es imperativo para las personas tener bien en claro o de forma aproximada cuánto pueden gastar mes a mes. Como indicamos anteriormente, la idea es pagar por un servicio que cumpla con nuestras expectativas mínimas. ¡Pero basta de cháchara! Es momento de revisar con cuidado estas clases de planes que nombramos.

Planes de pago: ¿contratar prepago o pospago (abono)?

La diferencia entre los tipos de pago no solo se trata sobre el “cómo” se hacen, sino también de qué ofrece cada empresa que se dedica a las telecomunicaciones. Por este motivo siempre es sabio revisar con cuidado los planes que cada compañía muestra en la publicidad o en sus sitios web oficiales. Hacer un cuadro comparativo que abarque la cantidad de dinero y los beneficios obtenidos puede ser de ayuda para un futuro cliente.

Es hora de entrar en el área de lo específico: ¿de qué se trata cada uno de los planes de pago? La realidad obliga a la gente a elegir entre unos u otros, así que veamos a cada uno de ellos y cómo trabajan ya que tienen grandes diferencias.

• Hablemos de los celulares prepagos primero. Su principal ventaja sobre otros sistemas de pago es que ofrece a cualquier persona que tenga en su posesión un chip prepago la posibilidad de utilizar cualquier otro teléfono (que sea de la misma empresa o liberado) para continuar aprovechando el plan que contrató. Es decir, aquellos con un plan prepago pueden ahorrarse el gasto de un nuevo celular.

Nos referimos a una forma de pago mucho más ágil y descontracturada, ya que se mimetiza con las necesidades que tenemos en lapsos más cortos de tiempo. Cuando una persona decide contratar un plan de prepago solo deberá tener una cosa en mente: pagar lo que sea necesario cuando sea necesario. De esta forma, mucha gente se libera de estar prisionera de un pago determinado de mes a mes.

El plan prepago es ideal para las personas que tienen trabajos que dependen de una comisión, como las ventas de bienes y servicios o, en el peor de los casos, un trabajo no registrado. Se dice “ideal” ya que ofrece una chance de seguir conectado al mundo a cambio de lo que cada persona desee gastar. En Argentina, por ejemplo, es común ver a personas comprando tarjetas de diferente valor en los kioscos para cargar en sus teléfonos.

• Si una persona se encuentra económicamente cómoda y con un ingreso estable lo más recomendable sería un plan pospago, el cual ahora analizaremos a fondo.

Más conocido como “abono” en algunos países, se trata de un plan que se paga a principios de mes y cuyos beneficios se encuentran bien establecidos (como por ejemplo cuántos datos móviles estarán disponibles, cuánto tiempo de llamadas gratis tendremos, etcétera). Los precios suelen variar según la compañía, por lo que revisar las ofertas es un aspecto muy importante antes de elegir una.

Las diferencias entre prepago y pospago son más que claras. Depende de cada persona elegir el plan que mejor le convenga para seguir conectado con su trabajo, seres queridos y otros servicios.

Afortunadamente, todas las empresas de telecomunicaciones ofrecen planes que se ajustan a personas con grandes diferencias económicas, algo que hace a la comunicación mucho más justa e igual entre todos.

¡La elección es completamente libre y a consideración de cada uno!