El procedimiento se llevó a cabo el 1 de noviembre, antes de la final de la Copa Libertadores 10 noviembre, 2023

Este viernes se dio a conocer que la Fiscalía Especializada en Eventos Masivos del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad incautó el celular de Cristian Riquelme, hermano del ídolo, en el marco de la causa que investiga a la dirigencia de Boca.

La Justicia tiene en la mira al Chanchi por reventa de entradas e indumentaria oficial del club Xeneize. El procedimiento se llevó a cabo el pasado miércoles 1 de noviembre, antes de la final de la Copa Libertadores.

El órgano judicial dio detalles del accionar en un comunicado, explicando que a Cristian Riquelme lo allanaron en el mes de agosto por “múltiples delitos, como ser la impresión de tickets para la reventa ilegal, conductas delictivas vinculadas con la venta ambulante, manejos de estacionamientos clandestinos, venta de indumentaria del club por fuera del circuito oficial y posibles conexiones de algunas autoridades del club con la barra brava”.

En ese momento en la casa de Cristian Riquelme se secuestraron carnets y entradas. Como elementos electrónicos se llevaron computadoras y tablets, pero no el celular: “En dicha oportunidad, alegó no contar con su teléfono por haber sufrido un robo la noche anterior”.

El propio JRR en una entrevista pasada pidió que la Justicia “devuelva la computadora que se llevaron porque es la que usa mi sobrina, de 3 años”.

La Fiscalía aseguró que el juzgado de Pablo Casas dio el visto bueno para el procedimiento: “Esto fue aceptado por el juzgado, que ordenó la medida que se realizó el pasado 1 de noviembre. Resta aclarar que el abogado defensor ofreció entregar el móvil con posterioridad a la disposición del juzgado. Se informa que todo lo actuado es conforme a derecho”.

Las quejas de Juan Román Riquelme

El vicepresidente apuntó, otra vez, contra la fiscal Celsa Ramírez y explicó el momento que atravesó su hermano.

“El miércoles nosotros viajamos a Brasil, con la final que teníamos, mi hermano salió de su casa, una camioneta blanca lo siguió y a mitad de camino esa camioneta blanca se le atravesó y lo hizo parar. Imaginate el susto que tenía cuando se dio cuenta de que esta camioneta lo estaba siguiendo. Vuelvo a repetir: lo siguieron por la calle, lo pararon a mitad de camino con un auto de civil. Mi hermano se asustó, dijo ‘me secuestraron de nuevo, cagamos’”.