El ente estadístico informará el dato de pobreza para la primera mitad del año. Las mediciones privadas esperan que la pobreza ronde el 50% mientras que existe alarma por el aumento de la pobreza infantil.

El Indec dará a conocer este jueves el dato de pobreza para el primer semestre de 2024. Será el primer dato oficial sobre el tema desde el cambio de Gobierno y de la devaluación aplicada en diciembre.

El último dato disponible, de diciembre del año pasado, dio cuenta de que el 41,7% de la población estaba bajo la línea de pobreza, mientras que el 11,9% estaba bajo la línea de indigencia. Sobre la base total de la población derivada del Censo 2022, esto arroja que en Argentina hubo más de 19 millones de pobres a finales de 2023 y más de 5 millones por debajo de la línea de indigencia.

En el caso de los menores de 14 años, el panorama siempre es peor. En el segundo semestre de 2023 el 58,4% de los menores de 14 estaban bajo la línea de pobreza. Para los grupos de 15 a 29 años la pobreza fue del 47% y para el segmento entre 30 y 64, fue del 36,8%. Para los mayores de 65, fue del 17,6%.

El fogonazo inflacionario de los primeros meses de 2024, la falta de recomposición del poder adquisitivo, sobre todo en la primera parte del año, la quita de programas sociales y la pérdida de puestos de trabajo son algunos de los elementos que siembran expectativas de una suba en torno a los 10 puntos para la pobreza en el primer semestre.

Hasta junio de 2024, la inflación había acumulado una suba del 79,8%, y la mayor parte del aumento se dio en los primeros meses del año (20,6% en enero, 13,2% en febrero y 11% en marzo, luego del 25,5% de diciembre). Para el mes, la canasta básica, que marca la línea de pobreza, acumulaba una suba de 63,4% y la alimentaria, que marca indigencia, una suba de 76,1%.

En este contexto, el Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina sostuvo que en el primer semestre la pobreza alcanzó al 52% de la población, pero distingue entre trimestres: en el primero, escaló al 54,9%, mientras que en el segundo se redujo al 49,8%. Según el nowcast elaborado por la Universidad di Tella, la pobreza alcanzó al 51,9% en el primer semestre.

Por su parte, LCG había estimado para el primer trimestre que la pobreza ascendía al 55% y afectaba a 25 millones de personas. Si bien no pudieron estimar, por falta de datos, el segundo trimestre, Florencia Iragui explicó que entre abril y junio, con la desaceleración de la inflación, el crecimiento real de los salarios en la comparación mensual y la recuperación de la actividad en mayo «llevaron al trimestre a reducir el impacto de la macro en los hogares, reduciendo de manera marginal la tasa de pobreza».

Sin embargo, destacó que todavía se mantendría en niveles altos y alertó sobre el impacto en la niñez. Según sus estimaciones, 7 de cada 10 chicos estaban en la pobreza en el primer trimestre. «Aún desde un nivel (históricamente) más elevado que en el resto de los rangos etarios, la pobreza aumentó más entre los sub 14 que en el resto (14 pp desde el 56% del 4T de 2023). Esto, aunque pueda reducirse para el segundo trimestre, deja un problema profundo y sensible para el futuro».