A pesar de no tener una buena relación con el líder de la Iglesia Católica, esta aproximación forma parte de la estrategia del candidato oficialista para enfrentarse a Javier Milei en la segunda vuelta.

En la misma noche en que el escrutinio arrojó que fue el candidato más votado, Sergio Massa envió señales de reconocimiento al Papa Francisco en un intento por mejorar su relación con el líder de la Iglesia Católica. Si bien se conoce que el candidato a presidente de Unión por la Patria no tiene una buena conexión desde los tiempos en que era funcionario del gobierno de Néstor Kirchner, esta aproximación forma parte de su estrategia para ganar votos de cara a la segunda vuelta electoral contra Javier Milei.

“No hay dudas de que frente a un pueblo absolutamente creyente, desde acá le decimos que desde el 10 de diciembre, gobernando la Argentina, vamos a trabajar para que en el 2024 nuestro Papa Francisco visite a la Argentina”, señaló el ministro de Economía en un acto fuera del búnker electoral.

La relación entre Massa y Bergoglio se vio afectada en el pasado debido a acusaciones que el entonces cardenal hizo respecto a la participación de Massa en una operación que pretendía desplazarlo de su cargo como arzobispado de Buenos Aires, dado que el presidente Kirchner lo consideraba “el jefe espiritual de la oposición” a su gobierno. Desde entonces, Bergoglio nunca recibió a Massa, lo que ha llevado al candidato a buscar un acercamiento.

Para Massa, una buena relación con el Papa podría traducirse en apoyo electoral, considerando el papel influyente de la Iglesia Católica en la sociedad argentina. Esta aproximación cobra especial relevancia en el contexto de las críticas de Milei hacia el Papa Francisco.

En el pasado, incluso antes de ser candidato, Milei había acusado a Francisco de “ser la encarnación del Maligno”, de propiciar “la justicia social que es propiciar el robo al que trabaja para dárselo a quien no le corresponde” e incluso de lanzarle insultos soeces. Luego de las PASO, los curas villeros celebraron una misa de desagravio al Papa, pero Milei los criticó por basarse en afirmaciones que tenían varios años y que, tras abrazar la política, había abandonado ese tipo de dichos destemplados. A su vez, en una posterior entrevista con el polémico periodista norteamericano Tucker Carlson lo acusó de “tener afinidad con dictaduras comunistas sangrientas”.

A pesar de estos intentos de Massa, en círculos eclesiásticos se enfatiza que la decisión del Papa de visitar el país no depende de los gobernantes en turno, sino de su encuentro con la comunidad católica y los argentinos en general.