Bomberos locales, de Embarcación y Urundel trabajan intensamente para controlar el medio centenar de focos de incendio. El pueblo de Colonia Santa Rosa está cubierto de humo.

Más de 50 focos de incendio se encuentran distribuidos en una vasta zona de Yungas de la localidad de Colonia Santa Rosa. El cuartel de bomberos local hace enormes esfuerzos por contener la voracidad de las llamas, que se acercan a los sectores urbanos que ya provocaron enormes daños a la naturaleza. Se sumó la colaboración de bomberos de Embarcación y de Urundel, con el escaso equipamiento con el que cuentan. 

De acuerdo a las primeras estimaciones, ya serían miles de hectáreas afectadas. El incendio se originó en zona de Yungas, a unos 5 kilómetros al suroeste del casco urbano de localidad. 
 

El fuego avanza hacia Calilegua, Jujuy

Los incendios comenzaron hace exactamente una semana, en la frontera entre el área citrícola y la zona de Yungas. “Seguramente alguien con muy ignorante de las consecuencias, prendió alguna fogata y se fue de control. Este es un problema gravísimo que ya arrasó con miles de hectáreas y al paso que vamos no da señales de que vaya a parar”, contó el productor agrícola local, Joaquín Fernández Ulivarri, en diálogo con El Tribuno.

A los profundos daños causados ya a la flora y a la fauna, ahora el fuego amenaza con extenderse al Parque Nacional Calilegua, ya que los vientos soplan hacia allí.

Vale la pena recordar, que el Parque Nacional Calilegua, en Jujuy, es la mayor área de conservación de la ecorregión de las Yungas y abarca una superficie de unas 76.000 hectáreas.

«Temor por problemas broncopulmonares»

Los vecinos temen que de persistir el humos tapando prácticamente toda la localidad, puedan aparecer problemas broncopulmonares. «Estamos preocupados especialmente por las personas mayores y los niños, ya que el humo es verdaderamente denso. La visibilidad en el pueblo no es mayor a los 40 metros y en las rutas hay que transitar con extrema precaución», explicó Joaquín Fernández Ulivarri.

Productores, comerciantes y vecinos de la zona colaboran con los bomberos locales, quienes combaten de día y de noche el fuego. Sin embargo, pese a la enorme voluntad y del esfuerzo, el equipamiento y cantidad de efectivos son insuficientes para la magnitud del incendio.