El 60° Coloquio de IDEA reunió en Mar del Plata a un centenar de hombres y mujeres de negocios. Las principales variables que monitorean y cómo analizan la economía.
El 60° Coloquio de IDEA reunió en Mar del Plata a un centenar de empresarios que dialogaron durante tres días sobre algunas de las principales temáticas que preocupan al sector privado, como la generación de empleo, el rol del Estado, la política fiscal y las oportunidades de inversión en la Argentina. Participaron el Presidente, Javier Milei, el ministro de Economía, Luis Caputo, y el de Desregulación, Federico Sturzenegger. También hubo encuentros secretos y paralelos al evento de los que participaron Mauricio Macri, el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, y el jefe de Gabinete, Guillermo Francos.
Más allá de las exposiciones que se realizaron en el auditorio del hotel Sheraton, los empresarios compartieron su mirada sobre la coyuntura económica y su perspectiva en el corto y mediano plazo. Entre esas cuestiones, varios ya piensan en cómo se desarrollarán sus actividades el año próximo y visualizan algunos desafíos.
A primera vista, los referentes del mundo empresarial mostraron un renovado optimismo. Respaldan el programa económico que propone el Gobierno, pero también hacen algunas advertencias y aseguran que “todavía falta”. Que pese a la confianza, los primeros pasos no aseguran un “cheque en blanco”.
Coinciden en que este año mostrará una caída en la actividad económica, con leves signos de mejoría, y creen que la evolución es muy heterogénea de acuerdo al sector. También afirman que la reactivación es aún muy incipiente y descartan la famosa “V” para hablar de la salida de la recesión.
Recesión, cepo y competitividad: la mirada de los empresarios
Sobre el futuro de la actividad económica, los empresarios valoran la desaceleración de la inflación y el superávit de las cuentas públicas como signo de ordenamiento a nivel macro, pero alertan que hay sectores que todavía no despegan, como el consumo masivo. “La recuperación viene lenta y los márgenes de ganancia están muy afectados. Creemos que los primeros cuatro meses del año próximo van a ser igual”, admitió un representante del rubro alimenticio.
“Financieramente este año está cerrando bien, pero la actividad todavía no. Ahora el gran desafío es sostener los números macro con crecimiento, es decir, que cuando mejore la actividad no haya traslado a precios. Crecer sin inflación”, reflexionó un industrial que caminaba por los pasillos del coloquio. “Ahora hay que ver cómo reactivas la economía y cuándo la gente lo empieza a ver”, sumó otro del sector automotriz.
Otra de las variables que siguen de cerca los corporativos es el frente cambiario. Si bien entienden que el Gobierno avanzará en la salida del cepo de forma gradual, la fecha concreta es todavía una incógnita y hay actividades que ven afectada su competitividad.
Entonces, si bien reclaman desarmar las restricciones al dólar, también creen que es necesario bajar la carga impositiva para mejorar su posición en relación con otros competidores. Creen que habrá un alivio en diciembre, por ejemplo, cuando finalice el impuesto PAIS, que aún mantiene un 7,5% de percepción sobre las importaciones.
“Hay dos partes. El corto plazo y el largo. En el corto, es un logro que el sistema financiero ya no tenga que prestarle plata al Estado y lo tenga disponible para el sector privado para mejorar capital de trabajo y capacidad ociosa”, expresó Gabriela Renaudo, presidenta del 60° Coloquio de IDEA, en diálogo con TN.
“En el mediano plazo, las restricciones cambiarias las tenés que levantar, pero entendemos que no se puede poner en riesgo la estabilidad macro. Es un proceso. Estamos alineados en la mirada del sector privado y el sector público. También tenemos un sistema impositivo muy distorsivo, que le pega a la competitividad de los empresarios, pero también al precio de todos porque tiene un efecto cascada. Los aranceles a la exportación también son muy altos”, agregó.
En esta ocasión, el evento empresarial se organizó bajo el lema “Si no es ahora, ¿cuándo?” y se basó en poner en debate las nuevas reformas y la posibilidad de que se concreten proyectos de inversión en el país. Si bien Milei en su discurso alentó el ingreso de capitales privados, los hombres y mujeres de negocios advirtieron que las inversiones demandan tiempo, confianza e incentivos.
“Los procesos de inversión son muy largos. Crece el crédito, pero no hay que ser ansioso. Lo mismo que con el cepo, ya nos dijeron que va a ser gradual”, expresaba un directivo desde los pasillos del Sheraton.
Por último, también hay un punto que repetían los empresarios a la hora de analizar los proyectos a futuro: la sostenibilidad de las medidas. Si bien comparten las decisiones oficiales, el mayor temor que reconocen en el sector privado es que el Gobierno tenga el respaldo político suficiente para mantenerlas en el tiempo.
“El cepo es importante, pero es más importante es que no haya marcha atrás. Que el proceso sea sostenible”, determinó uno de los asistentes. Por eso siguen de cerca, por ejemplo, el vínculo entre el Ejecutivo y el PRO. “Macri le puede dar la sustentabilidad que Milei necesita”, deslizaba un hombre cercano al expresidente que estuvo en el encuentro.
Las propuestas de los empresarios en el Coloquio de IDEA
Además de los paneles que se desarrollaron durante tres días, los empresarios de IDEA compartieron algunas propuestas con la mirada en el largo plazo.
Sobre la transformación del Estado, plantearon:
- Impulsar la eficiencia y eficacia del Estado mediante una mejor coordinación con el sector privado y entre los tres niveles de Gobierno para eliminar duplicidades, superposiciones y trabas burocráticas y de esta forma destrabar y potenciar la competitividad, productividad y el desarrollo de la Argentina.
- Resaltar la importancia del respeto irrestricto por la propiedad privada y de la eliminación de las formas no convencionales de su afectación, para fomentar la inversión a largo plazo y mejorar la competitividad de las empresas con actividad en Argentina.
Para modificar el sistema fiscal, sugirieron:
- Competitividad: eliminar impuestos distorsivos (Impuesto País, Débitos y créditos; Derechos de exportación; Ingresos Brutos, con compensación parcial a través de ventas finales y límite a tasas municipales) y generar políticas que alienten la inversión.
- Sostenibilidad: ampliar la base y promover la formalización, revisar los regímenes de promoción e inversión y promover una nueva ley de coparticipación.
- Simplificación: eliminar los impuestos de baja recaudación, reducir el costo operativo de la gestión tributaria, alentar la transparencia fiscal en los tres niveles de gobierno y alentar la conciencia ciudadana.