Jubilaciones: la oposición busca un acuerdo para aprobar la nueva fórmula en Diputados
La sesión fue convocada para las 11:00. Los dialoguistas y el kirchnerismo podrían acordar y avanzar con un proyecto a contramano del Gobierno
Con varios proyectos que modifican la fórmula de movilidad de las jubilaciones, la Cámara de Diputados sesionará este martes en un marco de expectativa por un posible acuerdo entre la oposición dialoguista y el kirchnerismo que permitiría darle media sanción a una iniciativa que va a contramano de los planes del presidente Javier Milei.
La sesión fue convocada para las 11:00 por los bloques UCR, Hacemos Coalición Federal, Coalición Cívica y bancadas provinciales, con un proyecto consensuado que dispone un incremento para las jubilaciones del 8,1% adicional al 12,5% que dio el Ejecutivo por decreto para el mes de marzo y contiene una cláusula que fija una compensación «extra» para cada año.
Con todos sus diputados presentes llegarían a 66, un número muy alejado de los 129 que se necesitan para tener quórum. La Libertad Avanza y el PRO no bajará al recinto hasta que no arranque la sesión. No obstante, Unión por la Patria se inclina por ayudar a que se inicie el debate, según adelantaron fuentes del espacio a iProfesional. Con 99 escaños, alcanza con que solo una parte del bloque kirchnerista diga presente.
«Que haya quórum depende de ellos«, deslizó a este medio una fuente del radicalismo. Lo que facilita la posible confluencia entre el kirchnerismo y los dialoguistas que abrir la sesión es que Unión por la Patria tiene un proyecto muy similar para modificar la fórmula de movilidad previsional.
Jubilaciones: ¿de qué depende el acuerdo que busca la oposición en Diputados?
Si hay quórum para iniciar la sesión -y todo indica que así será- se abre la posibilidad de un acuerdo entre los bloques para aprobar un proyecto conjunto que modifique la fórmula de movilidad actual y establezca un aumento adicional. La suma de radicales, federales y «lilitos» permitiría darle media sanción y girarlo al Senado, sin que el oficialismo pueda hacer nada para impedirlo.
Pero ese entendimiento, si bien no está lejos, tiene sus complicaciones porque depende, en primer lugar, de una negociación que incluye dos proyectos impulsados por el kirchnerismo para restablecer el Fondo de Incentivo Docente (FONID) que fue eliminado por el Gobierno y el financiamiento universitario.
En principio, el kirchnerismo daría quórum a la oposición dialoguista y podría aprobarse el proyecto con la nueva fórmula de movilidad
Unión por la Patria había pedido una sesión para las 14:00 que sumaba esos dos temas al de las jubilaciones, pero al haber quórum en la primera la segunda quedaría desactivada. En ese contexto, el kirchnerismo espera que la UCR tenga «el gesto» de aceptar la ampliación del temario con los temas educativos.
No obstante, el jefe del bloque radical, Rodrigo de Loredo, se resiste a ampliar el temario. Al igual que él, varios en el bloque plantean que el proyecto sobre financiamiento universitario perdió sentido tras el acuerdo entre el Gobierno y el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) por un aumento de 270% para gastos de funcionamiento y tampoco quieren tratar el tema FONID. «No vemos la necesidad de meter todo el mismo día», señalan en el radicalismo.
Ante una posible negativa del radicalismo, Unión por la Patria podría pedir que la ampliación del temario se defina en el recinto. La moción necesitará una mayoría de tres cuartos de los votos y, si bien no alcanzarían ese número, usarían esta herramienta para «exponer» a los diputados que están en contra y de paso meter una cuña en la UCR, dado que algunos diputados sí quieren debatir la agenda educativa.
¿Cuál es el principal desacuerdo sobre los proyectos?
El otro punto importante para que se dé un acuerdo entre los dialoguistas y el kirchnerismo sería el articulado del proyecto que se sometería a votación. El dictamen de Unión por la Patria coincide con el de la UCR y los federales en cuanto al aumento adicional del 8,1% y el ajuste mensual por inflación de las jubilaciones, pero la diferencia radica en el uso que se le daría al Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de la ANSES.
El kirchnerismo no quiere que nada afecte al FGS, mientras que el proyecto de los bloques dialoguistas se incluyó un artículo que permite usar esos fondos para pagar la deuda de la Nación con las cajas jubilatorias de las provincias no transferidas. La clave está en que el dictamen de mayoría es el de Unión por la Patria y, por lo tanto, sería el primero en ponerse a votación.
Una de las alternativas que se manejan en la oposición es acordar la aprobación general y luego dirimir ese punto de desacuerdo en la votación particular de cada artículo. Para negociar tendrán tiempo de sobra, dado que la sesión arrancaría con expresiones individuales donde el tema dominante será el escándalo por el reparto de alimentos y la crisis del Ministerio de Capital Humano.
Un eventual acuerdo opositor permitiría el avance de una nueva fórmula hacia el Senado y pondría en apuros a Milei
Solo eso llevaría como mínimo dos horas, a las que luego les seguirá el largo debate sobre los cambios a la fórmula de movilidad previsional que, en caso de que haya un acuerdo opositor y se aprueben, complicarán a Milei en dos sentidos. Por un lado, porque sería una nueva derrota legislativa y, por el otro, porque lo pondrían ante el dilema de vetar o no un proyecto que en los hechos implicaría una mejora en los haberes de los jubilados.
¿Qué plantea la oposición para la nueva fórmula de movilidad para jubilados?
El dictamen que impulsan la UCR, el bloque de Miguel Pichetto y la Coalición Cívica junto a las bancadas provinciales respeta la actualización mensual en base al índice de inflación (IPC) que fijó Milei por decreto, pero agrega un aumento de 8,1% por el mes de abril para que, sumado al 12,5% que dio el Gobierno, se alcance una recomposición del 20,6% que cubra lo que fue la inflación de enero.
Este fue un reclamo que había hecho meses atrás la oposición, pero que el Ejecutivo no recogió cuando cambió la fórmula de movilidad. Ahora, los diputados podrían incorporarlo con la fuerza de los votos. Pero además, el proyecto plantea que en marzo de cada año se aplique un aumento del 50% de la variación del índice salarial (RIPTE) por sobre el IPC del año anterior.
A eso le sumaron como tercer punto clave una «garantía del haber mínimo», que dispone para aquellas jubilaciones que estén por debajo del último valor de la Canasta Básica Total por adulto el cobro de «un suplemento dinerario, que tendrá carácter alimentario, hasta alcanzar dicho valor».
El dictamen que firmó el kirchnerismo por su parte es tan similar que el acuerdo que sondean para la sesión estuvo a punto de lograrse durante el debate en comisiones. Lo que frustró esa posibilidad fue la diferencia en torno al FGS.
Con estos dos proyectos sobre la fórmula de movilidad para las jubilaciones como los más importantes, la Cámara de Diputados se encamina a un sesión que promete ser maratónica y que podría dar lugar a un inesperado consenso entre la oposición dialoguista y el kirchnerismo que pondría en aprietos a Javier Milei y a su tropa legislativa, que tendría aún menos chances de revertir la situación en el Senado.