Nota extraída de Clarín por Walter Schmidt
En la cumbre del PRO Larreta aceptó que una encuesta defina al candidato del PRO en Ciudad y se afirma Jorge Macri, tal como promovía el expresidente. Pero se impuso en Provincia. ¡
“Yo tengo mi candidato a gobernador definido, y es Diego”, planteó Horacio Rodríguez Larreta ante los otros asistentes a la cumbre del PRO, Mauricio Macri, Patricia Bullrich y María Eugenia Vidal.
El expresidente se se venía manifestando a favor de una lista única. En el caso de Bullrich, lo que pedía la precandidata presidencial era que el postulante a gobernador se alineara con su candidatura. De lo contrario, elegiría directamente a alguien propio de la nómina que integran Cristian Ritondo, Néstor Grindetti, Joaquín de la Torre y Javier Iguacel.
Tardíamente, Macri venía replicando la idea del voto útil, es decir, que haya un candidato único en provincia de Buenos Aires y en la nación -aunque esto último es prácticamente imposible- para que en la noche de las PASO el candidato mejor posicionado, o a lo sumo el segundo mejor posicionado, sea el de Juntos por el Cambio. Lógica a la que ya adhirió Cristina Kirchner en relación al Frente de Todos.
Rapidamente Larreta obtuvo lo que pretendía. No prestarle su candidato, Santilli, a su contrincante pese a la posición de Macri, de un sector del radicalismo bonaerense y de la propia Bullrich.
Uno de los asistentes negó que se haya decidido el ingreso de José Luis Espert a Juntos por el Cambio. Pero se avanzó en la conformación de una comisión en la cual están los cuatro representados y que seguramente decidirán su incoporación. A partir de allí podría activarse modificar el nombre de la coalición opositora para contener también al nuevo integrante liberal.
Desde el radicalismo bonaerense aseguran que hoy, su apoyo no es para Larreta ni Bullrich, sino para sus, por ahora, candidato presidenciales, Gerardo Morales y Facundo Manes. No obstante, un dirigente de la UCR considera que la decisión tomada por el PRO, y promovida por Larreta, va en contra del objetivo de ganar la provincia.
Un encuestador que suele trabajar para el PRO desliza que el bonaerense es un escenario muy complejo dado el crecimiento de Milei y el achicamiento de Juntos por el Cambio. Y advierte que una competencia como las PASO, que divide el voto, en una provincia que no tiene balotaje, “te puede dejar tercero o cuarto por más que en la suma dé más que el espacio libertario”.
En la reunión en el departamento de Vidal, el acuerdo también llegó rapidamente sobre el candidato único del PRO en la Ciudad. Fue como un concesión de Larreta a cambio de la estrategia en la provincia. Se acordó un mecanismo de encuesta para definir si será Jorge Macri o Fernán Quirós. En principio, cada uno de ellos pedirá una encuesta y en quince días cotejarán los resultados.
Las encuestas de los equipos Quirós, Jorge Macri y Bullrich lo tienen al primo del ex presidente primero. De hecho, la que luce más ventajosa para el ministro de Salud porteño es una en la que aparece levemente por debajo de Jorge Macri, aunque la lectura que hacen es que como también figura Vidal en esa muestra, los votos de ellas irían para Quirós.
“Esto permite construir un camino para que Horacio baje la candidatura de Fernán sin pagar mas costo político por mantener una interna en la Ciudad”, asegura un dirigente macrista.
Más allá del acuerdo Larreta-Bullrich, la interna persiste.
El próximo desafío será definir las listas a diputados nacionales por la Ciudad. Históricamente, nunca se presentaron varias nóminas, y allí podría discutirse la conformación de una lista única en la que confluyan el PRO, la UCR y la Coalición Cívica, lo que ameritaría a una meganegociación en la que estén involucrados todos los sectores.
Tampoco está saldada, ni mucho menos, la grieta entre Macri y Larreta. El larretismo aduce que el expresidente viene promoviendo que María Eugenia Vidal juegue con Bullrich y que incluso le prometió un Ministerio en un eventual gobierno de la exministra de Seguridad. Aseguran que el argumento de Macri es que hay que ayudar a Bullrich si llega a la Casa Rosada ante la falta de estructura.
Obviamente, en el espacio de Bullrich niegan que la aspirante presidencial carezca de equipos. “Nos sobra, y no necesitamos la ayuda de nadie”, retrucan.