nota extraída de `TN por Carlos Pagni

El miércoles se va a entrevistar el presidente con Joe Biden, reunión que se realiza cuando todavía está caliente la atmósfera por la reunión del Grupo de Puebla que se celebró la semana pasada. Una reunión de líderes que están unidos todos por un solo factor, el sentimiento antiamericano, el odio a los Estados Unidos, el repudio al gobierno de Biden.

La página de Instagram de Fabiola Yáñez muestra su foto y un pie de foto: “Arribamos a Nueva York”, con una banderita de Estados Unidos, algo curioso. Hay otra curiosidad en la foto. ¿Dónde está el presidente? ¿Quién es el que saca la foto, el fotógrafo presidencial? ¿El presidente está escondido detrás de la primera dama? ¿Quién viajó? Ese brazo que toca a Jorge Argüello daría la impresión -es una hipótesis- de que ese es Alberto Fernández.

Curiosísima foto, porque en la página de la primera dama, daría la impresión de que hasta ella lo ignora, como para rectificar la sensación de un presidente muy débil hasta dentro de su familia.

Lo importante es que, en la página de la primera dama oficial, aparece una bandera de los Estados Unidos ligada a un viaje. El miércoles se va a entrevistar el presidente con Joe Biden, reunión que se realiza cuando todavía está caliente la atmósfera del kirchnerismo por la reunión del Grupo de Puebla que se celebró la semana pasada. Una reunión de líderes que están unidos todos por un solo factor, el sentimiento antiamericano, el odio a los Estados Unidos, el repudio al gobierno de Biden.

¿Cómo muta Alberto Fernández desde el Grupo de Puebla a Washington? ¿Cuáles son las contradicciones de un oficialismo que parece esquizofrénico? No es solamente este dato el importante. El miércoles van a hablar del alineamiento internacional, le van a sugerir que “no China”, van a hablar del litio y de los recursos que tiene en vista Estados Unidos sobre la Argentina. Ya lo dijo la jefa del Comando Sur, que el litio es clave para Occidente en contra de China. Van a hablar de telecomunicaciones y van a pedir plata. El único punto de la agenda de Argentina es pedir dinero.

Viaja Massa para eso. Massa, que llega a Washington siempre de la mano de un amigo, Marco Rubio. Él es el senador republicano que más a la derecha está dentro de ese partido, el ideólogo, durante el gobierno de Trump, de que se invada Venezuela con fuerzas americanas.

¿Cómo es que, del Grupo de Puebla, va a llegar de la mano a pedir dinero con la abogacía de un ultraderechista como Marco Rubio? ¿Cómo se explica que Massa gestione su acuerdo con el Fondo y su financiamiento por esa vía cuando Cristina Kirchner y Máximo Kirchner dicen que hay que romper el acuerdo con el Fondo? Hay una explicación para esta disociación, para esta escisión. Sucede siempre que, cuando los gobiernos se encuentran sin salida, sobre todo en el plano económico, en este caso sin dólares, con una inflación al 100%, con una caída del salario real dramática, sobre todo para las elecciones, suele suceder que cuando esa es la escena en la que les toca operar, empieza a ganarles la irracionalidad. Y esto que estamos viendo lo vamos a ver mañana. Es enloquecedor: por un lado, bolivarianos con el Grupo de Puebla. Después, a rendirle cuentas a Biden de nuestra política exterior.