Desde depósitos de combustibles hasta instalaciones científicas; el Kremlin evita dar precisiones sobre lo que está ocurriendo

Las autoridades rusas confirmaron este lunes un importante incendio en un depósito de combustible en el oeste de Rusia, una situación que podría pasar desapercibida si no se tratara del cuarto siniestro que se registra en menos de una semana en instalaciones cruciales del estado.

El Ministerio de Emergencias había confirmado durante la mañana que el fuego comenzó a registrarse desde la madrugada en el almacenaje en la ciudad de Bryansk, aunque todavía se desconocen las causas que lo ocasionaron.

Según informaron, el deposito era propiedad de la firma estatal de Transneft-Druzhba, una filial de la firma controlada por el estado Transneft, que gestiona el oleoducto Druzhba, que lleva crudo a Europa. Casualmente, el mismo se encuentra a tan solo 100 kilómetros de la frontera con Ucrania aunque por el momento no hay sospechas de que se tratase de un ataque ordenado desde Kiev.

Lo cierto es que lo ocurrido en Bryansk no es un hecho aislado y es el cuarto suceso similar que ocurre en menos de una semana: el 21 de abril un incendio que arrasó la semana pasada un instituto de investigación militar en Rusia en la localidad de Tver, a 180 kilómetros de Moscú, dejó 17 muertos.

Según las primeras informaciones, el incendio se habría debido a un cortocircuito en el viejo cableado eléctrico del edificio. En Rusia son habituales los incendios accidentales debido al mal estado de las instalaciones eléctricas o al incumplimiento de las normas de seguridad. Según informa La Nación, el Instituto incendiado se especializaba en investigaciones vinculadas a la defensa aeroespacial y al desarrollo de nuevos sistemas antiaéreos.

Ese mismo día también se registró otro incendio en la planta química de Dmitrievsky, en la ciudad de Kineshma, a 950 kilómetros de la frontera con Ucrania y a 400 kilómetros al este de Moscú. Las voraces llamas fueron registradas por los habitantes y revelaron la magnitud del siniestro:

Al día siguiente, el 22 de abril, Korolyov, la “capital espacial de Rusia” evidenció un incendio en la zona industrial de la ciudad, aunque las autoridades rusas trataron de dar precisiones al respecto y solamente confirmaron la existencia del siniestro. Sin embargo, en redes sociales circularon videos que mostraban como el humo negro se esparcía por la ciudad.

El hecho de que estos acontecimientos sucedan en medio de la guerra con Ucrania, no puede descartarse que el Gobierno de Kiev tenga alguna responsabilidad. Semanas atrás hubo fuertes sospechas de que las tropas ucranianas habían atacado por primera vez

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