Los legisladores se negaron a tratar el tema en medio del revuelo político que causó la renuncia de Guzmán y los cambios en el gabinete.

Tras el golpe de timón que sufrió el Frente de Todos, con la salida de Martín Guzmán y los recambios en el área económica, el bloque de senadores oficialistas, que preside José Mayans, se vio obligado a postergar la sesión que planeaba realizar este jueves para tratar el proyecto que amplía la Corte Suprema de Justicia a 25 miembros.

La iniciativa impulsada por los gobernadores peronistas con el aval de Cristina Kirchner, no pudo ser puesta en debate por la resistencia de varios legisladores oficialistas a discutir el tema mientras el Gobierno de Alberto Fernández se debate en medio de una feroz interna política y de una crisis económica a la que no puede encontrarle solución.

“Esto es un descalabro; además, quizás este no sea el momento ideal para discutir la ampliación de la Corte”, le dijo a La Nación un senador oficialista. Además, la posibilidad de obtener el quorum necesario, comenzó a caerse en la tarde del martes cuando el puntano Adolfo Rodríguez Saá le comunicó al jefe de su bancada, que no estaba dispuesto a votar el proyecto por considerar que “no refleja ni respeta el federalismo”.

Así, el tratamiento del proyecto que apoyan 35 senadores propios, con aliados como el rionegrino Alberto Weretilneck, de Juntos Somos Ríos Negro; la misionera Magdalena Solari Quintana, del Frente Renovador de la Concordia, la peronista riojana Ada Clara del Valle, del monobloque Hay Futuro Argentina, no tendría futuro dentro de la Cámara alta.

La iniciativa fogoneada por la Vicepresidenta, establece que serán 25 los integrantes de la Corte Suprema, en lugar de los cinco con lo que ahora cuenta. Además, establece que el Senado será el encargado de aprobar a los 21 miembros que faltan tal como lo establece la Constitución Nacional, respetando la designación de los actuales Horacio Rosatti, Juan Carlos Maqueda, Ricardo Lorenzetti y Carlos Rosenkrantz.