Desesperado pedido de Alberto a los bonistas: “Ayuden a la Argentina a salir de esta postración”

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El mandatario se refirió al problema del déficit fiscal y señaló que, aunque el Estado debe hacer una “enorme inversión fiscal” para sostener la economía en medio del Covid-19, “el objetivo no es vivir con déficit, sino superarlo” El presidente Alberto Fernández encabezó esta tarde una videoconferencia con Susan Segal, coordinadora general del Consejo de las Américas, que aprovechó para enviarle un mensaje a los bonistas: “Confío en que los acreedores entiendan que estamos haciendo un enorme esfuerzo y les pido que ayuden a la Argentina a salir de esta postración”.

Del otro lado de la pantalla el Presidente fue escuchado por más de 1.000 empresarios y políticos estadounidenses y latinoamericanos, quienes aguardan los próximos pasos que dará la Argentina en cuanto a sus políticas económicas y las novedades en función de las negociaciones con los bonistas.

“El gobierno que me precedió no pudo cumplir sus compromisos. En el año 2003, cuando fui jefe de Gabinete, lo que en verdad me pasó es que recibí un país en default. Y durante dos años lidiamos para sacar al país del default. Y ahora estamos con el mismo propósito. Esa deuda es un fuerte condicionante. Estamos pensando en un modelo de desarrollo que no postergue a más gente. El esfuerzo siempre recae sobre esos sectores más vulnerables. La forma de hacerlo es a través de la inversión privada para que produzca y genere empleo”, agregó el mandatario, acompañado por el ministro de Economía, Martín Guzmán.

En cuanto a la oferta realizada, Fernández admitió que la oferta extranjera “no es igual a la nuestra, nos demanda más esfuerzo, pero como nosotros queremos actuar de buena fe, seguiremos discutiendo. Nosotros hemos hecho la oferta posible, y es imposible que nos podamos mover de este último esfuerzo”.

Sin embargo, el Presidente le pidió apoyo a los acreedores, luego de que ayer los tres comités de bonistas presentaran una nueva contrapropuesta que se acerca más a la oficial, pero implica un mayor esfuerzo por parte del Gobierno.

“Yo no estoy acá para pelear con nadie; estamos para resolver un problema en términos sensatos. Hemos hecho un enorme esfuerzo y seguimos discutiendo el tema de la deuda aún cuando la pandemia nos sigue pegando . Necesitamos comprensión de todos. Esto es lo que podemos, no podemos más. No es un capricho, es sensatez”, aseguró el jefe de Estado.