sábado, octubre 5

Karina Milei se puso al frente de la negociación política para evitar nuevas derrotas legislativas

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La hermana del Presidente se reunió con los líderes de los bloques aliados al Gobierno en el Congreso para cerrar filas de cara a una semana compleja para el oficialismo.

En vísperas de una semana que vaticina nuevas derrotas para el oficialismo en el Congreso, la secretaria de la Presidencia, Karina Milei, se pone al frente de la negociación política y se reunió con los líderes de los bloques aliados para amortiguar el impacto en medio de la crisis interna que atraviesa La Libertad Avanza (LLA).

Por ello, recibió al presidente de la bancada del PRO en Diputados, Cristina Ritondo, junto con los macristas Silvia Lospennato y Silvana Giudici. Además del referente del Movimiento de Integración y Desarrollo (MID) y ex libertario, Oscar Zago. Mientras que por el oficialismo estarán presentes los legisladores: Gabriel Bornoroni, Nadia Márquez, Carlos Zapata y Santiago Santurio.

Según indicaron desde Casa Rosada, también estarán presentes en el cónclave político el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger; el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem y el secretario de Relaciones Parlamentarias, Omar de Marchi.

El principal motivo de la reunión es evitar que la oposición junte un tercio de los Diputados para poder rechazar el veto de Javier Milei a la reforma jubilatoria, que le otorgaba un aumento del 8,1%, es decir unos 17 mil pesos) a los salarios del sector pasivo.

Si bien, los bloques de Unión por la Patria, el radicalismo y la izquierda lograrían obtener la cantidad necesaria de votos para reinstalar la ley de movilidad jubilatoria que fue sancionada semanas atrás, desde el Gobierno quieren asegurarse que no hay ninguna figura aliada acompañando para poder mostrar que controla la política, una de las principales debilidades de la gestión libertaria.

Otra de las batallas que enfrenta el oficialismo es en el Senado, en donde el próximo jueves, se tratará el rechazo de Diputados a los más de $100 mil millones en fondos reservados para la SIDE y la desestimación del veto presidencial a la ley de movilidad jubilatoria. Aquí la pelea interna con Victoria Villarruel, que preside la Cámara alta le juega en contra al Gobierno que deberá negociar muy bien para lograr un menor impacto negativo a nivel legislativo y no quedar en debilidad política ante la oposición.